La candidatura de Carles Puigdemont y Junts ya tiene nombre. «Junts + Puigdemont per Catalunya» se ha registrado finalmente y los independentistas de centroderecha han esperado hasta el último día para hacerlo, un hecho que se ha convertido en habitual. Y es que, el plazo para presentar la coalición expiró este pasado miércoles.
Hacerlo después significaría que el resto de grupos aceptaría incluirse bajo las siglas del partido independentista de cara a las elecciones catalanas del próximo 12 de mayo. Puigdemont toma así la vía presidencialista para tratar de reclutar al mayor número posible de efectivos en una batalla a pecho descubierto tras aprobarse la amnistía. El líder de Junts ha escondido sus propias siglas en sus últimos actos, como el de Elna, el municipio donde se guardaron miles de urnas para celebrar el 1-O.
En esta batalla tendrá frente a él y Junts a ERC, PSC y todo el bloque constitucionalista, con el PPC como principal favorito para encabezar la candidatura que defienda los intereses de España. Para ello, el líder de Junts ha marcado distancias al encabezar una candidatura completamente transversal, donde se integran formaciones de todo el arco parlamentario, de derecha a izquierda independentista en Cataluña, aunque la mayoría son viejos conocidos de la política del territorio.
LA IMAGEN DE PUIGDEMONT, ¿EN LA PAPELETA?
El expresidente de la Generalitat podría incluso colocar su imagen en la papeleta, como hizo en las pasadas elecciones europeas de 2019. Y es que, aunque es conocido entre la mayoría de los votantes, este gesto le hizo ser eurodiputado hace cuatro años, después de haber huido de la justicia para refugiarse en Waterloo.
Aún no se ha desvelado la lista cremallera de este movimiento transversal, pero las fuentes consultadas de Junts apuntan a una lista con independientes llegados de numerosos sectores del independentismo e incluso fichajes estrella, como algún periodista de renombre de TV3. La fórmula escogida por Puigdemont evita encasillar directamente a Junts y desactiva así el argumento de ERC y PSC para cargar contra la derecha independentista.
Esta es la misma fórmula utilizada en las pasadas elecciones municipales, con nombres sin siglas, como Trias per Barcelona. Aquella candidatura cosechó 14 concejales y se alzó como la más votada en la Ciudad Condal, a pesar de los intentos del PSC de mostrarse como el partido ganador al tener los apoyos de ERC, PP y los Comuns de Ada Colau. Trias, de hecho, ha mostrado su satisfacción ante la fallida moción de confianza a la que se ha sometido el líder del PSC, Jaume Collboni, quien ha perdido los apoyos de los ‘populares’ y de los ‘morados’.
Con el nombre de Puigdemont dos veces en la papeleta, el votante tendrá claro a quién escoge a la hora de votar, sin posibilidad de equivocarse
Puigdemont no esconde las siglas, pero se diferencia de ellas con el fin de tratar de marcar distancias y evitar alejar a los posibles votantes. Se trata de un golpe de efecto que tendría un recorrido corto, pero la cercanía de las elecciones, a poco más de seis semanas, serviría para convencer a los indecisos de una vuelta a la unidad independentista, de la que se ha bajado ERC.
LOS NOMBRES DEL INDEPENDENTISMO, CAMBIANTES
Con el nombre de Puigdemont dos veces en la papeleta, el votante tendrá claro a quién escoge a la hora de votar, sin posibilidad de equivocarse, como pasó con JxSí, JxCat y PDeCat. Junto al expresidente de la Generalitat acuden también Demòcratres de Catalunya, de Antoni Castellà. Se trata de la escisión soberanista e independentista de la extinguida Unió Democràtica de Catalunya, cuando la lideró durante décadas el nombre de las 1.000 caras, Antoni Duran Lleida, contrario a la ruptura con el resto de España, pero favorable al pacto fiscal y a la financiación singular de Cataluña.
Además, Puigdemont vuelve a integrar a Reagrupament y Moviment d’Esquerres de Catalunya (MESCat), como a Estat Català, Alternativa Verda, Acció per la República y Joventut Republicana de Lleida. En estas formaciones aparecen nombres de de JxCat y amigos personales de Puigdemont, como el alcalde de Montblanc.
Las mismas formaciones se juntaron en las listas electorales de 2021, bajo el paraguas de JxCat, logrando varias de ellas diputados gracias a la cremallera. Eso sí, els Verds-Alternativa Verda afirma que no apoya la lista, pero hay un partido con un nombre similar, Alternativa Verda, quien irá a los comicios del 12 de mayo con Puigdemont.
ACUSACIÓN DE MALVERSACIÓN Y BLANQUEO CONTRA PUIGDEMONT
Societat Civil Catalana (SCC) ha solicitado a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo que investigue al prófugo Carles Puigdemont, expresidente de la Generalitat, por la posible comisión de delitos de malversación de caudales públicos con enriquecimiento personal y blanqueo de capitales.
El pasado 29 de febrero el Tribunal Supremo abrió una causa especial por terrorismo contra los aforados Carles Puigdemont y Rubén Wagensberg en el marco del caso Tsunami Democràtic, que instruye el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón. Según el Tribunal Supremo, Puigdemont ejerció el «liderazgo absoluto» de Tsunami, el movimiento que promovió los violentos disturbios de 2019 tras hacerse pública la sentencia del procés.
La plataforma constitucionalista ejerce la acusación en el procedimiento contra Tsunami desde noviembre de 2023 y se ha personado también como acusación popular en la causa especial del Supremo contra Puigdemont y Wagensberg. Por este motivo, ha solicitado al Tribunal Supremo que investigue «a la máxima urgencia dado su potencial delictivo» el pago en criptomonedas que Carles Puigdemont recibió en su cuenta personal de Ethereum a través del protocolo conocido como Tornado Cash en diciembre de 2021.
TORNADO CASH Y EL PAGO DE CRIPTOMONEDAS
Este mezclador de criptomonedas, que envía la transferencia al destinatario sin que se sepa el origen del dinero, es una herramienta para blanquear dinero. De hecho, esta plataforma fue sancionada por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por permitir el lavado de dinero. La recepción de una transferencia en la criptomoneda ether en la cuenta personal de Puigdemont a través de una herramienta tan cuestionada como Tornado Cash podría evidenciar -en caso de demostrarse el desvío de dinero público para financiar Tsunami Democràtic- un acto de apropiación de fondos públicos con ánimo de lucro personal.
Asimismo, el uso de esta plataforma podría implicar una intención de ocultar o encubrir el origen de los fondos, sugiriendo que estos podrían proceder de actividades delictivas previas, lo cual constituiría un acto de blanqueo de capitales. Precisamente para seguir el rastro de los criptoactivos y prevenir el blanqueo de dinero, el Parlamento Europeo ha aprobado el primer texto legislativo de la UE para asegurar la trazabilidad de las transferencias.
Desde hace más de un año SCC trabaja en un proyecto de investigación para rastrear la injerencia rusa en el proceso separatista catalán. Desde noviembre de 2020 estamos personados, al igual que otras asociaciones, en el caso Voloh. De la instrucción de una de las piezas separadas del caso, que investiga los contactos del independentismo con el Kremlin, se desprenden indicios de que el entorno de Puigdemont trabajó para desarrollar una “legislación propia sobre las criptomonedas adecuada a los intereses rusos”.
