Durante casi dos décadas, Paloma Rosasolano ha sido una figura fundamental en la vida de la familia real española. Su estrecha relación con los Reyes Felipe y Letizia se consolidó tras la boda real y se profundizó con la llegada al trono. No solo se limitaba al ámbito doméstico, sino que también participaba activamente en la crianza de la princesa Leonor y la infanta Sofía.
3Impacto en la reina y Paloma
Este episodio ha llevado a la reina Letizia a experimentar una pérdida significativa de poder y estatus en la familia real. Como consecuencia, Paloma ahora solo se queda a dormir en Zarzuela cuando el rey no está presente, lo que indica un cambio drástico en su situación y relación con la familia.