Desde hace casi una década, las tardes de La 1 se han visto marcadas por la creatividad de Josep Cister. Este guionista valenciano, conocido por su trabajo en ‘Acacias 38’, se embarcó en un nuevo proyecto con Bambú Producciones y RTVE tras el final de esta serie en 2021. ‘Dos vidas’ fue el resultado de esta colaboración, aunque su andadura finalizó en 2022. Sin desanimarse, de las cenizas de este proyecto surgió ‘La promesa’, rápidamente convirtiéndose en una de las revelaciones más impactantes de la ficción local en los últimos años. Esta serie ha logrado capturar la atención de la audiencia con su intrincada trama y el desarrollo emocional de sus personajes, especialmente el apasionante romance entre Jana y Manuel, interpretados por Ana Garcés y Arturo Sancho, respectivamente.
El desafío de proporcionar un cierre satisfactorio a la historia de amor entre los protagonistas es una tarea complicada que todo guionista enfrenta en algún momento de su carrera. A veces, este desenlace coincide con el final de la serie, complicando aún más el proceso creativo. Esta situación se ha visto en series emblemáticas como ‘Luz de luna’, ‘Expediente X’, ‘Bones’ y ‘Médico de familia’, donde la resolución de las tensiones entre los personajes principales se ha anticipado, generando diversos resultados. En ‘La promesa’, el dilema persiste: determinar el momento perfecto para unir definitivamente a Jana y Manuel, asegurando que la serie continúe capturando la esencia que la ha hecho tan especial para su audiencia.
Un secreto a voces en ‘La Promesa’
El idilio entre Jana y Manuel, el corazón de ‘La promesa’, navega en aguas turbulentas, escondiéndose entre las sombras de un secreto que no lo es tanto. María Fernández, interpretada por Sara Molina, y Abel, a quien da vida Alejandro Vergara, se han convertido en los custodios involuntarios de esta delicada verdad. Ambos personajes están al tanto de las intenciones y sentimientos que se cocinan entre el heredero del marquesado de Luján y la doncella, cuya llegada al palacio fue motivada por una venganza personal y la búsqueda de su hermano, Curro (Xavi Lock).
A pesar de las complicaciones que supone estar en medio de un triángulo amoroso, Abel muestra una sorprendente discreción. Su silencio sugiere una complicidad o quizás una estrategia propia, manteniendo en vilo a la audiencia sobre las verdaderas intenciones y futuras acciones de los personajes involucrados. Este enigma añade una capa más de intriga a la ya compleja trama de ‘La promesa’, prometiendo giros inesperados que mantienen a los espectadores al borde del asiento.
Estrategias y secretos del pasado
El doctor Bueno, un personaje crucial en la trama de ‘La Promesa’, esconde secretos que pronto podrían salir a la luz, sugiriendo que su armario contiene más de un ‘cadáver’. Los avances oficiales de la serie insinúan que está dispuesto a usar esta información oculta como una baza a su favor. En un juego de silencio a cambio de silencio, Abel decide mantener en secreto la relación extramatrimonial de su amigo Manuel con Jana. A cambio, espera que ambos dejen de husmear en su pasado. Este arreglo revela las complejidades y los secretos entrelazados que sostienen la trama de la serie, donde cada personaje parece tener algo que ocultar y mucho en juego.
Por otro lado, incluso Alonso y Cruz, interpretados por Manuel Regueiro y Eva Martín respectivamente, han comenzado a especular sobre el interés que su hijo menor podría tener en la doncella, ahora convertida en sirvienta después de una misteriosa ausencia. Sin embargo, la posibilidad de un romance entre Manuel y Jana es rápidamente desestimada, subrayando la complejidad de las relaciones y los secretos familiares. La historia de Manuel no es única en su familia; su padre, el marqués de Luján, también tuvo sus propios escarceos amorosos, reflejando el adagio «De tal palo, tal astilla». Esta dinámica no solo aumenta la tensión narrativa sino que también plantea preguntas sobre la repetición de patrones y secretos a lo largo de generaciones en ‘La Promesa’.
Secretos al borde de ser descubiertos
La trama de ‘La Promesa’ se enriquece con cada capítulo, y el episodio 312 no es la excepción. Lorenzo, encarnado por Guillermo Serrano, pone a Manuel contra las cuerdas, interrogándolo sobre su creciente fascinación por Jana. Este momento crucial no solo intensifica la trama sino que también presagia la inminente exposición de un amor oculto. La relación entre Manuel y Jana, tejida en secreto, pende de un hilo, a punto de ser descubierta por ojos curiosos.
Este entramado de secretos y mentiras es una muestra del genio narrativo de Josep Cister, que mantiene a la audiencia en constante expectativa. La inevitable revelación de este romance clandestino se cierne sobre la serie como una espada de Damocles, añadiendo suspense y complejidad a la narrativa. Cómo y cuándo se destapará la verdad sigue siendo un misterio, uno que Cister maneja con maestría, asegurando que ‘La Promesa’ siga capturando la atención de su público.
Revelaciones y futuros posibles
En una reciente conversación con ‘Fórmula TV’, el productor ejecutivo de ‘La Promesa’ desveló detalles fascinantes sobre el futuro de la serie y sus queridos personajes, Jana y Manuel, cuya relación, afectuosamente apodada ‘Januel’ por los fans, asegura que encontrará su momento de clausura. Siguiendo la estela de parejas icónicas como ‘Luimelia’ o ‘Maitino’, ‘Januel’ promete un desenlace que satisfará a su fiel seguimiento, sin marcar el fin de su presencia en la serie. El guionista sugiere que, aunque su romance alcance un punto de resolución, tanto Jana como Manuel seguirán siendo pilares fundamentales de la trama que continúa evolucionando.
Además, Josep Cister comparte su entusiasmo por explorar nuevas narrativas dentro del universo de ‘La Promesa’. Fantasea con la posibilidad de desarrollar una historia paralela centrada en los orígenes del matrimonio entre Cruz y Alonso, revelando cómo se cruzaron sus destinos. Igualmente, se muestra interesado en profundizar en la vida de Jana antes de su llegada al palacio, incluyendo su relación con el doctor que le impartió valiosas lecciones de medicina, demostradas de manera impresionante al operar a su hermano Curro. Estas perspectivas abren un abanico de posibilidades para expandir el lore de ‘La Promesa‘, manteniendo a la audiencia enganchada con nuevos hilos narrativos y el desarrollo profundo de sus personajes.
Continuidad asegurada y riqueza de personajes
En su entrevista con ‘Fórmula TV’, Josep Cister, el cerebro detrás de ‘La Promesa’, ofrece un vistazo esperanzador al futuro de la serie, confirmando su continuidad al menos hasta diciembre de 2024. Este anuncio no solo tranquiliza a los seguidores de la trama, sino que también subraya la confianza en la profundidad y el potencial que aún reside en sus personajes y sus historias. Cister, con una carrera adornada por su trabajo en seriales de época aclamados como ‘El secreto de Puente Viejo’ y ‘Acacias 38’, destaca la riqueza de los personajes de ‘La Promesa’, mencionando que son «muy ricos» y tienen «mucho pasado». Esta complejidad y profundidad son precisamente lo que permite a la serie seguir explorando nuevas tramas y desarrollos, prometiendo mantener a la audiencia enganchada con más intrigas, romances y conflictos.
Un futuro abierto
Respecto al desenlace de ‘La Promesa’, Cister admite no tener aún una imagen clara de cómo concluirá la serie cuando ese momento llegue. Este enfoque en el presente, sin precipitarse hacia el final, es indicativo de su metodología creativa, que prioriza la evolución natural de la historia y sus personajes sobre el trazado de un fin predeterminado. Esta flexibilidad narrativa no solo enriquece la experiencia del espectador, permitiendo que la trama se despliegue de manera orgánica y sorprendente, sino que también deja espacio para la innovación y la adaptación a medida que la serie progresa. Así, Cister mantiene abiertas todas las posibilidades, asegurando que ‘La Promesa’ continúe siendo un relato vibrante y cautivador, lleno de misterios por resolver y historias por contar.
