El flan casero es un postre tradicional que ha deleitado a muchas generaciones con su textura suave y sabor dulce. Aunque existen numerosas variantes, una de las formas más sencillas y populares de prepararlo es utilizando tan solo dos ingredientes principales.
Esta versión simplificada no solo mantiene la esencia del flan tradicional, sino que también facilita su preparación, haciéndolo accesible para cualquier aficionado a la cocina.
7EL FLAN EN LA CULTURA GASTRONÓMICA
El flan no es solo un postre, sino también un elemento cultural significativo en la gastronomía española y latinoamericana. Su presencia en celebraciones, fiestas y reuniones familiares subraya su papel como símbolo de hospitalidad y tradición. En España, el flan se ha convertido en un clásico en menús de restaurantes y hogares, siendo un referente de la repostería casera.
Su popularidad también se extiende al ámbito literario y cinematográfico, donde a menudo se le menciona o se le utiliza como metáfora de la dulzura y la comodidad. Esta amplia aceptación y valoración del flan demuestra cómo un postre tan simple ha logrado trascender su rol culinario para convertirse en un icono cultural que evoca recuerdos, tradiciones y afecto, manteniendo su lugar especial en el corazón de muchas generaciones.
