Durante la Semana Santa, las torrijas son una tentación irresistible para muchos. Este dulce tradicional, elaborado a partir de rebanadas de pan empapadas en leche, huevo y azúcar, se ha convertido en un elemento esencial de las celebraciones. Además de su sabor delicioso, las torrijas ofrecen la oportunidad perfecta para utilizar el pan sobrante del día anterior, lo que las convierte en un postre práctico y sabroso.
10UN ALIMENTO RESERVADO A LOS DÍAS DE AYUNO
Con la llegada de la Semana Santa y la Cuaresma, las torrijas adquirieron un significado religioso, ya que se consideraban un alimento reconfortante y energético para sobrellevar el ayuno. Además, el empleo de ingredientes como la leche, los huevos y el azúcar simbolizaba la riqueza y la abundancia que se celebraba al finalizar el período de abstinencia.
Con el paso del tiempo, las torrijas se han convertido en un dulce tradicionalmente asociado a la Semana Santa y la Pascua, pero también se disfrutan durante todo el año en diferentes variantes y preparaciones. Desde las clásicas torrijas bañadas en miel hasta las más modernas y sofisticadas, este postre sigue siendo una delicia apreciada por muchas personas en España y más allá.