En la gastronomía española, hay platos que evocan la tradición de nuestras costas y el buen hacer de las cocinas que han pasado sabiduría generación tras generación. Hoy, les traigo una receta que combina el sabor intenso del mar con la sutil complejidad de los fideos a la cazuela: una combinación deliciosa y atrevida, que hará las delicias de los más exigentes comensales.
Este plato, impregnado de la esencia del Mediterráneo, es una auténtica experiencia culinaria que, gracias a los sabores de los mejillones y cigalas, se convierte en una propuesta irresistible para cualquier mesa.
1UN FESTÍN MARINERO EN TU MESA
Imagina la combinación perfecta de los aromas y sabores que brinda el mar: esos son los mejillones y cigalas, protagonistas indiscutibles de esta receta. Los mejillones, con su sabor yodado y carne jugosa, aportan una nota de frescura, mientras que las cigalas contribuyen con un toque dulce y sofisticado que se potencia al cocinarlas en su punto justo. Antes de comenzar la preparación, se recomienda escoger productos de la mejor calidad posible, preferiblemente de origen local, lo cual garantiza frescura y ayuda a fomentar la economía de nuestras costas.
La preparación de un buen sofreído es el alma de nuestros fideos a la cazuela. Una base de aceite de oliva virgen extra con cebolla finamente picada, junto a un toque de ajo y tal vez algún pimiento, será el lecho donde posteriormente reposarán los fideos, que en su punto de tostado admiten los jugos que sueltan los mariscos, y así, empiezan a tomar vida en una cazuela que rezuma aromas de antaño.
Pasando a la acción, el secreto de unos fideos jugosos reposa en la cantidad y calidad del caldo. Aquí, entra en juego el caldo de pescado que habremos preparado con anticipación, quizás con espinas y cabezas de pescado, y que proporciona un fondo de sabor imprescindible para que el conjunto armonice. Tras añadir los fideos al sofrído y dejar que se impregnen bien, se incorpora gradualmente el caldo, manteniendo una cocción lenta y controlada para que los fideos absorban bien todos los sabores.