En una reciente entrevista con Madridiario, Emilio Viciana, consejero de Educación, Ciencia y Universidades de la Comunidad de Madrid, ha expresado abiertamente su desacuerdo con la obligación de que los estudiantes coticen por sus prácticas. Desde que esta medida se convirtió en obligatoria, Viciana ha sido un férreo opositor, argumentando que, «hay que tener en cuenta que hablamos de estudiantes, no de trabajadores».
El consejero ha planteado sus preocupaciones sobre las implicaciones de esta política, afirmando que percibe la obligatoriedad de cotizar como un intento del Gobierno por enmascarar las cifras reales del desempleo juvenil. Según Viciana, obligar a los estudiantes a cotizar por sus prácticas no solo desvirtúa la naturaleza educativa de estas experiencias, sino que también podría perjudicar la participación de las empresas en programas de prácticas, afectando negativamente a las oportunidades de empleo para los jóvenes.
La postura de Viciana refleja un debate más amplio sobre el papel de las prácticas en la formación académica y profesional de los estudiantes, así como sobre las políticas laborales dirigidas a la juventud. Mientras algunos defienden la cotización como un paso hacia la protección de los derechos laborales de los estudiantes, otros, como Viciana, la ven como una medida contraproducente que podría obstaculizar el acceso al mercado laboral para los jóvenes.
VICIANA CRITICA LA COTIZACIÓN COMO UNA ESTRATEGIA DEL GOBIERNO CENTRAL
El consejero de Educación, Emilio Viciana, lanzó una fuerte crítica hacia la reciente medida gubernamental que impone la cotización de prácticas para estudiantes. En declaraciones recientes, Viciana afirmó que esta medida, adoptada sin consultar a la comunidad educativa, es en realidad una estrategia del Gobierno central para maquillar las cifras de desempleo juvenil.
«Es una medida que han adoptado, al margen de la comunidad educativa, con el objetivo de maquillar las cifras de desempleo juvenil y que está generando bastantes problemas. Nos lo han querido vender como una medida de carácter social, argumentando que los alumnos no estaban protegidos. Esto es absolutamente falso», expresó Viciana.
El consejero siguió con su ataque contra el Ejecutivo central, señalando al citado medio que no han evaluado adecuadamente las consecuencias de obligar a las empresas a cotizar por los estudiantes en prácticas. «El Gobierno central se ha encargado de salir a desmentirlo y bonificar en un 95 por ciento, pero no sabemos si se mantendrá en próximos cursos. Es un coste que puede elevarse bastante y serían los centros de FP, las universidades o las propias comunidades autónomas quienes deberían asumirlo», agregó Viciana.
ASEGURA QUE LAS EMPRESAS HAN HUIDO TRAS ESTA PRÁCTICA DEL GOBIERNO
Por otro lado, Emilio Viciana, comentó su pesar por la fuga de empresas que ha seguido a la decisión del Gobierno central de imponer la cotización de prácticas para estudiantes. En una entrevista con Madridiario, lamentó que esta medida haya tenido un impacto negativo en la disposición de las empresas a acoger a estudiantes en prácticas.
Viciana recordó que la admisión de los estudiantes en las prácticas es voluntario para las empresas, pero ahora se ha vuelto más costoso tanto en términos económicos como en términos de gestión. «Hacer altas, tramitar bajas… Hasta organismos públicos, como los ministerios, que solían acoger a estudiantes en prácticas, se han retirado», afirmó el consejero.
Es una medida que han adoptado, al margen de la comunidad educativa, con el objetivo de maquillar las cifras de desempleo juvenil
Emilio Viciana, consejero de Educación, Ciencia y Universidades de la Comunidad de Madrid
Además, Viciana destacó otras dificultades que han surgido como resultado de esta medida, como el hecho de que el Servicio Público de Empleo Estatal dé de baja como demandantes de empleo a los alumnos que inician prácticas. «La comunicación está funcionando francamente mal… Ni siquiera la Seguridad Social está capacitada para implementar esta medida en tan poco tiempo», agregó.
Estas declaraciones subrayan los desafíos y obstáculos que han surgido como consecuencia de la decisión del Gobierno central de imponer la cotización de prácticas para estudiantes. La preocupación de Viciana por la fuga de empresas y las dificultades administrativas adicionales destaca la complejidad de la implementación de esta medida y sus potenciales repercusiones en el mercado laboral y en la experiencia educativa de los estudiantes.
COTIZACIONES DE PRÁCTICAS: ¿CUÁNTO SUPONE PARA LAS EMPRESAS?
Las nuevas normativas que imponen la cotización de prácticas para estudiantes han generado un debate sobre el impacto económico que esto representa para las empresas. Según el Boletín Noticias Red del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, para el alumnado de prácticas formativas no remuneradas, la cotización consistirá en una cuota máxima mensual de 57,87 euros por contingencias comunes, excluyendo la protección por la prestación de incapacidad temporal. En cuanto a las contingencias profesionales, la cuota máxima de cotización es de 7,03 euros.
Además, estos contratos formativos estarán exentos de contribuir al desempleo, al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA) y a la formación, según lo establecido en un Real Decreto-ley recogido en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Existen distintas responsabilidades en cuanto al cumplimiento de las obligaciones económicas con la Seguridad Social, dependiendo de si se trata de prácticas remuneradas o no. En el caso de prácticas remuneradas, el pago de las cuotas corresponderá a la entidad u organismo que financie el programa de formación. En el caso de prácticas no remuneradas, estas obligaciones también corresponderán a la empresa que acoge a los becarios en sus centros de trabajo como parte de su formación, aunque si las compañías llegan a un acuerdo con el centro formativo, este puede asumir el coste de las cotizaciones del alumnado en prácticas.
Independientemente de quién asuma la responsabilidad, las cuotas deberán ingresarse siguiendo los plazos establecidos: el primer trimestre del año deberá efectuarse en el mes de abril; el segundo, en julio; el tercero, en octubre; y el último trimestre del año, en enero del año siguiente, según detalla la Unión Sindical Obrera (USO) en su web.
DESIGUALDAD ENTRE LA FP Y LA UNIVERSIDAD: MALESTAR POR DIFERENCIA EN BONIFICACIONES DE PRÁCTICAS
La reciente diferencia en las bonificaciones de las prácticas no remuneradas entre estudiantes de Formación Profesional (FP) y universitarios ha generado un profundo malestar en el ámbito educativo. Según el portal Educaweb, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones anunció una bonificación del 95% en la cuota correspondiente a las contingencias comunes para estudiantes universitarios en prácticas no remuneradas, mientras que para los alumnos de FP, esta bonificación alcanzaría el 100%, con el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes (MEFPD) asumiendo el 5% restante.
Esta disparidad en las bonificaciones ha provocado una fuerte reacción por parte de las universidades, como lo expresó la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (Crue) en un comunicado. «Las universidades nos sentimos agraviadas, en términos comparativos, al conocer cómo desde el Gobierno se ha asumido la gestión y el coste de las prácticas correspondientes al estudiantado de FP, sin dar el mismo tratamiento al universitario, lo cual establece un evidente principio de discriminación», sostiene la Crue.
En el caso de las empresas, más del 98% han eludido el pago de las cotizaciones y el 100% su gestión administrativa
CRUE
Además, la Crue señala el desentendimiento de las empresas y las administraciones públicas en la gestión administrativa y el pago de las cuotas. «Han sido las universidades las que hemos tenido que asumir estas tareas. En el caso de las empresas, más del 98% han eludido el pago de las cotizaciones y el 100% su gestión administrativa».
Esta situación está obligando a las universidades a aumentar su personal técnico, de gestión y de administración, así como a invertir en plataformas digitales y en la formación de sus equipos, detalla la Crue en su comunicado.
La disparidad en las bonificaciones de las prácticas no remuneradas entre estudiantes de FP y universitarios ha avivado un debate sobre la equidad en la educación y el trato igualitario entre los distintos niveles de formación. Mientras tanto, las universidades continúan enfrentándose a desafíos financieros y administrativos adicionales como resultado de esta diferencia en las políticas gubernamentales.