En el mundo del fitness y el deporte, las agujetas son un invitado frecuente tras un intenso entrenamiento o tras retomar la actividad física después de un periodo de inactividad. Estas típicas molestias musculares, científicamente conocidas como dolor muscular de aparición tardía (DMAT), pueden llegar a ser un verdadero obstáculo para mantener la constancia en nuestra rutina de ejercicios.
Sin embargo, existen múltiples métodos y trucos que se pueden realizar cómoda y fácilmente desde nuestro hogar para aliviar su impacto. En este artículo, te revelaré remedios que no solo prometen ser reconfortantes, sino también eficaces y basados en evidencias.
3PRÁCTICAS RECONFORTANTES: MASAJES Y ESTIRAMIENTOS
El masaje es una práctica milenaria que ha demostrado tener efectos beneficiosos en la recuperación muscular. Utilizar técnicas de automasaje o herramientas como rodillos de espuma puede mejorar la circulación sanguínea en el área afectada, lo que ayuda a transportar los nutrientes necesarios para la reparación del tejido muscular. Además, el masaje contribuye a disminuir la tensión en los músculos y puede proporcionar un alivio inmediato del dolor.
Una práctica complementaria al masaje son los estiramientos suaves y controlados. Si bien los estiramientos intensos pueden agravar el daño muscular, una rutina de estiramientos ligeros puede mejorar la flexibilidad y promover un mejor rango de movimiento, lo que a su vez puede aliviar la sensación de rigidez que suele acompañar a las agujetas. No obstante, es importante ser cauto y escuchar a nuestro cuerpo para evitar ir más allá de lo que los músculos pueden soportar en ese momento.
Con estos conocimientos y prácticas, podemos convertir el proceso de recuperación de las agujetas en una experiencia más llevadera y, por qué no, disfrutar el merecido descanso, sabiendo que estamos contribuyendo positivamente a la recuperación de nuestro cuerpo. Después de todo, el bienestar y la constancia en la actividad física no están reñidos con un poco de autopampering casero.