Cuando las personas buscan amor y compañía en Internet, pueden encontrarse con riesgos. El «romance scam» o estafas del amor es uno de esos peligros. Aquí, los estafadores se hacen pasar por alguien en quien confiar, y logran construir relaciones falsas para luego pedir dinero o información bancaria. Después de engañar, simplemente desaparecen, dejando a la víctima en una situación financiera difícil y con el corazón roto. Es fácil pensar que a uno no le pasará, pero todos estamos expuestos a este tipo de estafas.
1TODOS PODEMOS CAER
Todos, en mayor o menor medida, somos vulnerables a caer en una estafa amorosa, ya que como seres humanos, nuestra necesidad innata de conexión y afecto nos hace susceptibles a ello. Estos estafadores explotan nuestra necesidad básica de conexión y afecto. Se aprovechan de esta vulnerabilidad para ganarse nuestra confianza y manipular nuestras emociones. Utilizan diversas tácticas, como crear perfiles falsos en redes sociales o sitios de citas, y establecer relaciones ficticias con sus víctimas.
A lo largo del tiempo, han perfeccionado sus técnicas para identificar y explotar las debilidades emocionales de las personas. Por ejemplo, pueden usar halagos, promesas de amor eterno o incluso simular situaciones de emergencia para presionar a las víctimas a enviar dinero o información personal. Es importante reconocer que nadie está inmune a este tipo de estafas, ya que todos, en algún momento, podemos caer bajo la influencia de nuestras emociones.
