En todos los hogares, la pasta es un plato recurrente en los menús semanales. Es fácil de preparar, económico y gusta a todos, grandes y pequeños. Incluso recetas clásicas como los macarrones con bechamel que te presentamos a continuación siguen siendo deliciosamente interesantes. Solo necesitas hacer una buena salsa bechamel para cubrir los macarrones antes de gratinar en el horno, y puedes elegir el queso que más te guste.
Como puedes imaginar, esta receta es totalmente personalizable: puedes añadirle bechamel y bacon, bechamel y tomate, bechamel y queso, bechamel y chorizo, bechamel y pollo… Las opciones son infinitas y dependen de tu creatividad. En esta ocasión, vamos a utilizar jamón. Para esta receta, optaremos por unos macarrones rayados, que son más atractivos visualmente y tienen mejor capacidad para retener la salsa que los acompaña que los lisos.
1ALGUNOS TRUCOS QUE MEJORAN EL RESULTADO
Hemos agregado un toque de cebolla pochada a la salsa bechamel, lo que no es necesario pero añade un extra de sabor. También podrías optar por añadir unas rodajas finas de puerro. Además, hemos añadido un toque de nuez moscada para realzar el sabor lácteo. Un consejo útil es reservar un poco del caldo de cocción de los macarrones para agregar a la bechamel en caso de que quede demasiado espesa.
Los trozos de jamón cocido son los protagonistas de esta salsa. Lo ideal son los tacos, pero si son difíciles de encontrar, puedes usar lonchas y cortarlas en tiras finas. Para servir, espolvoreamos un poco de queso manchego recién rallado. Pero veamos paso a paso como hacer este sencillo pero exquisito plato de pasta al horno.