El primer Pleno ordinario del año en el Ayuntamiento de Madrid ha dado inicio con un enfrentamiento notable entre el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, y la portavoz socialista, Reyes Maroto, en medio de la polémica generada por las talas de árboles vinculadas a las obras de ampliación de la Línea 11. La atención se centró en la afectación al Paisaje de la Luz, con la izquierda en el Consistorio, advirtiendo sobre el riesgo que corre la declaración como Patrimonio de la Humanidad de este emblemático enclave madrileño.
Reyes Maroto (PSOE) no dudó en expresar sus temores al alcalde de Madrid: «Usted será el único responsable si nos quitan la declaración de Patrimonio de la Humanidad». Asimismo, Maroto recordó a Almeida que durante la semana pasada enviaron una carta a la Unesco solicitando su intervención ante lo que consideran una «tala ilegal» de árboles protegidos en el Paisaje de la Luz. Advirtió que estas acciones tendrán consecuencias.
La sesión plenaria estuvo marcada por momentos de tensión y choques entre los concejales de la oposición y el presidente del Pleno, con llamadas al orden dirigidas a varios ediles de la izquierda.
Las talas, asociadas a las obras de expansión de la Línea 11, han generado una fuerte controversia y han despertado la inquietud de diversos sectores de la sociedad madrileña. El Paisaje de la Luz, reconocido por su importancia cultural y paisajística, se encuentra en el centro del debate sobre la preservación del patrimonio y la adecuada gestión de las obras públicas.
El enfrentamiento en el Pleno pone de manifiesto las tensiones existentes entre el equipo de gobierno y la oposición en el Ayuntamiento de Madrid, especialmente en temas sensibles como la protección del patrimonio y el medio ambiente. La advertencia de la izquierda sobre las posibles consecuencias para la declaración de Patrimonio de la Humanidad destaca la gravedad de la situación y subraya la necesidad de una gestión más cuidadosa y transparente en proyectos urbanos que afecten a áreas de gran valor histórico y cultural.
LA REACCIÓN DE ALMEIDA ANTE LAS DECLARACIONES DE MAROTO
El edil madrileño, José Luis Martínez-Almeida, ha reaccionado con contundencia ante las declaraciones de la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, quien expresó sus temores sobre la posible pérdida de la declaración de Patrimonio Mundial para el Paisaje de la Luz debido a las polémicas talas de árboles vinculadas a las obras de ampliación de la Línea 11.
Martínez-Almeida criticó fuertemente a Maroto, acusándola de «denigrar» constantemente la imagen de Madrid con el objetivo de que la Unesco retire la distinción al Paisaje de la Luz. Ante estas acusaciones, el alcalde de Madrid no dudó en replicar a la socialista durante el Pleno.
«Está usted deseando que nos quiten la declaración de Patrimonio Mundial, pero, a pesar de sus deseos, no va a suceder tal cosa», comentó Almeida hacia Maroto. Además, aprovechó para cuestionar la capacidad de trabajo de la portavoz socialista en Madrid, sugiriendo que está “subarrendada” al Gobierno de España para abocarse a un choque institucional.
Señora Maroto, déjese de hipocresías, déjese ya de denigrar la imagen de Madrid. Póngase a trabajar por esta ciudad, que llevan ocho meses pagándole el sueldo a cambio de nada
José Luis Martínez-Almeida
En su turno de réplica, Almeida dirigió un mensaje directo a Maroto: «Señora Maroto, dicen ustedes triunfantes el otro día que no se va a talar ninguno de los 247 árboles de la obra de Adif. Mire usted a los ojos de los vecinos y dígales que esos 247 árboles van a permanecer donde están». Luego, añadió: «Señora Maroto, déjese de hipocresías, déjese ya de denigrar la imagen de Madrid. Póngase a trabajar por esta ciudad, que llevan ocho meses pagándole el sueldo a cambio de nada».
El cruce de declaraciones refleja la tensión existente entre el equipo de gobierno y la oposición en el Ayuntamiento de Madrid, exacerbada por las controversias en torno a las talas de árboles y su impacto en el Paisaje de la Luz. La defensa por parte de Almeida de las acciones municipales y la crítica a Maroto marcan un nuevo episodio en el conflicto político sobre la gestión de proyectos urbanos en la capital.
MAESTRE Y MAROTO UNEN FUERZAS CONTRA ALMEIDA
La tensión en el Ayuntamiento de Madrid ha alcanzado un nuevo nivel durante el primer Pleno del año, no solo por el choque entre la exministra socialista y el edil madrileño. La pieza clave para el malestar en el Pleno la terminaron de poner entre Rita Maestre, y la portavoz socialista, Reyes Maroto, que unieron fuerzas para cuestionar al alcalde, José Luis Martínez-Almeida. El punto central de la discordia fue la propuesta de convocar una reunión del Consejo Cívico y Social del Paisaje de la Luz, un órgano participativo que defiende este emblemático enclave madrileño.
La iniciativa, presentada por Más Madrid, recibió el voto en contra de los populares, resultando rechazada en el Pleno. La negativa de convocar esta reunión provocó tensiones en la Corporación municipal, sumándose a otras polémicas recientes, como la actuación del portavoz de Vox, Javier Ortega Smith, que culminó en su reprobación.
Durante la sesión, los socialistas preguntaron a Almeida por los «agravios y desprecios» que, según ellos, sufren los grupos de la oposición. La edil socialista Enma López acusó al alcalde de excluirlos de la Comisión de Patrimonio y del acto del 25N. Por su parte, la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, respondió acusando a la oposición de victimismo y de no aceptar que no gobiernan. La tensión escaló cuando Sanz recordó la agresión del edil socialista Daniel Viondi al alcalde, calificándola como la «gran aportación» al Pleno por parte de la oposición socialista.
Las fricciones no se limitaron a los partidos, ya que el presidente del Pleno, Borja Fanjul, fue objeto de críticas por su papel tras la agresión de Ortega Smith. Fanjul tuvo que llamar al orden en varias ocasiones, tanto a Maestre como a Maroto, pero no llegó a expulsar a nadie de la sesión. La izquierda, representada por Más Madrid y el PSOE, se unió para demandar más explicaciones sobre las oposiciones para Policía Municipal, judicializadas por presuntos amaños. Ambos grupos abogaron por la creación de una comisión de investigación, pero la propuesta fue rechazada por la mayoría del Consistorio, con PP y Vox votando en contra.
Asimismo, Inma Sanz, defendió la postura del gobierno municipal, enfatizando el respeto a las leyes, a los jueces y a los principios democráticos, incluida la presunción de inocencia. Sanz instó a colaborar con la investigación judicial en curso en lugar de generar controversia.
Sin duda, el ambiente enrarecido en Cibeles revela una falta de consenso y un aumento de las tensiones políticas en el Ayuntamiento de Madrid, marcando un inicio de año caracterizado por los choques entre los diferentes grupos políticos.
