Llevamos más de un año inmersos en una crisis abrumadora: primero la pandemia, después diferentes conflictos bélicos, la inflación, los problemas medioambientales… Ahora, a las dificultades existentes se suman los desembolsos navideños y un aumento en el costo de la electricidad en pleno invierno, lo que complica aún más la situación. Así las cosas, es obligatorio hacer malabares con nuestros recursos para gestionarlos de manera óptima, eliminando gastos prescindibles y logrando cierta holgura al final de cada mes. Incluso podemos ahorrar algo. Aunque muchas personas no controlan adecuadamente sus finanzas, el método Kakebo, originario de Japón y utilizado desde 1904, puede ser la solución.
3ANOTAR INGRESOS Y GASTOS
Registrar meticulosamente todos los ingresos y gastos diarios, incluyendo los denominados ‘gastos hormiga’, como las pequeñas compras diarias (un refresco a media mañana, un periódico, etc.), es esencial para llevar un control y poder ahorrar. Anotar cada detalle nos brinda una mayor conciencia sobre cómo gastamos el dinero, permitiéndonos tomar decisiones informadas para manejar nuestra economía de manera más efectiva.
