Desde que ChatGPT irrumpió con fuerza a finales del año 2022, las grandes tecnológicas dieron comienzo a una carrera por tratar de hacerse con el dominio de la inteligencia artificial generativa. Junto a empresas como Microsoft o Samsung, desde Google han hecho lo propio y ahora ha tomado la decisión de flexionar su IA para dar comienzo a una revolución en su buscador, lo que supondrá una gran transformación.