‘La Promesa’, la serie de La 1 de TVE, nos trae un episodio lleno de estrategia y tensión. El centro de atención recae en Pelayo, el conde de Añil, quien arriesga su permanencia en la serie con un plan tan audaz como peligroso: el uso de un señuelo. Este giro en la trama se presenta tras una propuesta de Jerónimo, que no logra convencer al conde y provoca una reprimenda de Catalina, un personaje clave en la historia.
El último episodio destaca por su intriga y los juegos de poder entre los personajes, revelando la complejidad de sus relaciones y estrategias. La decisión de Pelayo de implementar un señuelo sugiere una profundidad y astucia en su carácter, generando expectativas altas sobre las consecuencias de su jugada.
Este momento en ‘La Promesa’ no solo es crucial para el destino de Pelayo, sino que también marca un punto de inflexión en la serie, manteniendo a los espectadores en vilo sobre el futuro de sus personajes favoritos.
5La propuesta arriesgada de Jerónimo
Jerónimo, consciente de los riesgos, sugiere continuar con el plan original, a pesar de la amenaza que representa Mr. Cavendish, la cual considera más grave que la del marqués. Su propuesta de fraccionar el transporte del cargamento en varias partes, en lugar de una sola entrega, parece una solución viable. Sin embargo, esta idea incrementa la inquietud de Pelayo, quien teme que aumenten las posibilidades de un encuentro desafortunado con Walter y Alonso.
Este planteamiento de Jerónimo no solo refleja su intento de manejar una situación peligrosa, sino también la creciente complejidad de la trama. La serie nos sumerge en un laberinto de estrategias y decisiones arriesgadas, donde cada paso puede tener consecuencias imprevisibles, tanto para los personajes como para el desarrollo de la historia.