Aunque el pan sigue siendo uno de los alimentos más consumidos en España, con un 92 % de la población ingiriéndolo regularmente, su consumo ha disminuido en los últimos 20 años. La media ha descendido de 50 kilos por hogar en 2001 a 30,7 kilos en 2021. La asociación incorrecta con intolerancias o el temor al aumento de peso podría ser una de las razones detrás de esta disminución, a pesar de que los expertos concuerdan en que el pan es un componente valioso en una dieta equilibrada. Entonces, ¿por qué hemos reducido su consumo?
7EL PAN TOSTADO ENGORDA MENOS
Es falso que el pan tostado engorde menos. Una rebanada de pan aporta las mismas calorías tanto estando fresca como tostada. La única diferencia radica en que la tostada puede pesar menos debido a la evaporación del agua. Si el objetivo es perder peso, el pan fresco es más aconsejable, ya que proporciona una mayor sensación de saciedad, manteniéndonos llenos por más tiempo.