Aunque el pan sigue siendo uno de los alimentos más consumidos en España, con un 92 % de la población ingiriéndolo regularmente, su consumo ha disminuido en los últimos 20 años. La media ha descendido de 50 kilos por hogar en 2001 a 30,7 kilos en 2021. La asociación incorrecta con intolerancias o el temor al aumento de peso podría ser una de las razones detrás de esta disminución, a pesar de que los expertos concuerdan en que el pan es un componente valioso en una dieta equilibrada. Entonces, ¿por qué hemos reducido su consumo?
4ES MÁS SANO EL PAN INTEGRAL
Es verdadero que el pan integral es más saludable. Mientras que el pan blanco se elabora con harina refinada, perdiendo parte del grano que contiene fibra, minerales y vitaminas, el pan integral utiliza el grano completo (endospermo, salvado y germen), aumentando significativamente su valor nutricional.
Investigaciones científicas indican que consumir granos enteros puede reducir el riesgo de enfermedades cardiacas, accidentes cardiovasculares y varios tipos de cáncer. La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) destaca que 45 g diarios de alimentos con harinas integrales ayudan a disminuir el riesgo de diabetes tipo 2 y cáncer de colon.