La Unión Europea ha asestado un nuevo golpe a Meta, después de que los organismos reguladores hayan determinado que la empresa de Mark Zuckerberg hace un uso inadecuado de los datos de sus usuarios. Es por ello por lo que prohíbe el espionaje de datos personales para publicidad, una decisión que puede tener sus consecuencias en Facebook e Instagram.
5PAGAR POR TUS DERECHOS
Ante la presión ejercida desde Bruselas, Meta optó por una estrategia controvertida, que fue la de lanzar un plan de suscripción de pago tanto en Instagram como en Facebook. De esta forma, los usuarios que no quieran que su privacidad sea explotada con fines publicitarios, deben hacer un pago de 12,99 euros al mes o más de 250 euros al año.
Los usuarios que no quieran pasar por caja, pueden seguir utilizando ambas redes sociales de forma gratuita, pero en este caso Meta sí que rastreará y utilizará sus datos con fines comerciales, lo que lejos de suponerle una solución, sigue generándole problemas con los reguladores.
