Antojos, ¿quien no los sufre de vez en cuando, o puede incluso que con mucha frecuencia?
Esos caprichos incontrolables de ciertos alimentos que nos impulsan a recorrer distancias para obtener una hamburguesa, a salir bajo la lluvia en busca de un helado o a desviarnos de nuestras responsabilidades solo para disfrutar de una taza de café.
Cuando sentimos ese deseo apremiante por comer algo específico, lo llamamos antojo, una señal que nuestro cuerpo emite para satisfacer una necesidad nutricional inmediata. El reto se presenta cuando interpretamos ese antojo como la necesidad de consumir ingredientes poco saludables. La buena noticia es que si aprendemos a interpretar estos mensajes, podemos sustituirlos por opciones alimenticias más saludables.
8ANTOJO DE CARNE ROJA
Estos antojos suelen señalar una deficiencia de hierro en el organismo, siendo las mujeres más propensas a la pérdida de hierro debido a la naturaleza de su fisiología. Aunque los suplementos de hierro son una opción para abordar esta carencia, es beneficioso incluir en la dieta alimentos ricos en hierro, como legumbres, berberechos, sardinas, ciruelas, higos y otras frutas secas. Estos alimentos no solo contribuyen a satisfacer el antojo de carne roja, sino que también ofrecen una variedad de nutrientes esenciales para mantener un equilibrio nutricional adecuado. Combinar opciones dietéticas y, cuando sea necesario, suplementos, es clave para asegurar un aporte adecuado de hierro y promover la salud general.