Cuando buscamos perder peso, muchos optamos por seguir una alimentación basada en dietas más o menos estrictas o experimentar con trucos nuevos. Sin embargo, la realidad es que la mayoría, un 81% de los españoles, termina fracasando en sus intentos dietéticos, a pesar de que el 76% admite no estar satisfecho con su peso, según revela la Encuesta XLS Medical sobre los factores de éxito y fracaso en la pérdida de peso, llevada a cabo por la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad con casi 3.000 participantes.
3APRENDER A ESCUCHAR AL CUERPO
Los defensores de la alimentación intuitiva afirman que todos los animales, incluyendo los humanos, cuentan con hormonas reguladoras del apetito y la saciedad (leptina y grelina), y simplemente es cuestión de prestar atención a esas señales. La ventaja de comer únicamente cuando se tiene hambre radica en la creación de una relación más positiva con la comida, eliminando la sensación de estar a dieta, la categorización de alimentos como buenos o malos, y consumiendo solo lo necesario para satisfacer las necesidades del cuerpo.
Suena ideal siempre y cuando partamos de hábitos nutricionales saludables, como elegir alimentos nutritivos, comer a un ritmo adecuado y controlar las porciones. Pero esto no siempre se cumple en la práctica, y este es el principal problema de este método.