El partido de Pablo Iglesias ha reaccionado de manera contundente tras la declaración de Pedro Sánchez sobre su nuevo equipo de Gobierno. Podemos se queda fuera del Consejo de Ministros tras la renuncia de Nacho Álvarez de regentar un ministerio. Así, la nueva legislatura acaba con las intenciones de los morados de seguir haciendo política dentro de las instituciones e Ione Belarra, la secretaria general del partido, ha dejado claros sus objetivos: estarán dentro de Sumar, pero protagonizando la resistencia el interior de la formación de Yolanda Díaz.
Por eso, los militantes de Podemos han amanecido este martes con una carta escrita directamente por Belarra en la que la dirigente informaba de los próximos pasos de la formación, tras ponerles en contexto de las últimas decisiones del nuevo Gobierno. La secretaria general afirma en este escrito que «lo ocurrido en estos últimos días no es sino la confirmación final de una estrategia determinada y mantenida en el tiempo por parte del PSOE y Sumar que tiene como evidencia la sustitución de Podemos».
Este remplazo de fuerzas en la izquierda es, según la líder ‘morada’, una representación simbólica de esta corriente política, ya que acepta «la subordinación al PSOE y la concertación con los poderes económicos y mediáticos». Cataloga así al partido de Yolanda Díaz como una alternativa «servil» y «funcional» a los intereses de «poderes «que sostenían y aún sostienen al régimen bipartidista».
PODEMOS, EN LA OPOSICIÓN DESDE DENTRO
El partido de los morados ha tenido que resignarse a formar parte del Congreso de los Diputados sin tener más protagonismo de los cinco escaños que Sumar le ha dejado obtener. La secretaria general de Podemos señala directamente a Yolanda Diaz de orquestar la desaparición de ‘los morados’ desde que aceptó reemplazar a Pablo Iglesias como vicepresidenta segunda del Gobierno, siendo su último movimiento «la expulsión definitiva del Gobierno de la única fuerza política que peleó en 2019 para que el gobierno de coalición pudiera existir».
Sin embargo, Belarra ha querido dejar claro a su militancia que no se han rendido. En la carta ha remitido su objetivo de tener una «completa autonomía» para así recuperar su «capacidad política». Así, Podemos pretende establecer su propio corriente y sus propios acuerdos electorales «solamente cuando estos sean útiles y siempre que las listas se conformen democráticamente mediante primarias y sin vetos».
Más allá de las diferentes especulaciones sobre la deriva de Podemos y de las claras discrepancias con Yolanda Díaz, el partido no se irá al grupo mixto. La formación de Belarra se quedará formando parte de la coalición de partidos bajo el paraguas de la ya ministra de Trabajo, pero sin estar de acuerdo con ella. Una relación que implicará, según Belarra, «ser la herramienta fundamental» para «forzar a que haya algunos avances sociales en esta legislatura».
UNA RESISTENCIA CÓMODA PARA PODEMOS
El partido morado ha dejado clara la decisión de no marcharse al grupo mixto con el argumento de que ya han definido su «autonomía» dentro de la coalición y que ha sido respaldada, además, por sus bases. Sin embargo, su permanencia dentro de Sumar supone caminar de una manera más acomodada y menos contradictoria para Podemos.
En el caso de abandonar la coalición de Yolanda Díaz, ‘los morados’ podrían recuperar protagonismo pero a su vez perderían una parte importante de ingresos. Separarse de la disciplina de la ministra de Trabajo supondría para Podemos la pérdida del 23% de las subvenciones que recibe la coalición, un porcentaje que pactaron ambos partidos en el acuerdo que firmaron para presentarse de manera conjunta a las elecciones del 23 de julio.
Además de la cuestión económica, Podemos tendría un difícil crecimiento nacional en el caso de marcharse al grupo mixto. Aunque su protagonismo podría ser mayor, adquieren una posición más comprometida ya que se acercaría al trabajo de los partidos de derechas de ser parte de la oposición.
Tal y como analiza el periodista Antonio Maestre sobre esta cuestión en la red social antes llamada Twitter, «lo cierto es que Pedro Sánchez en lo que respecta a políticas de izquierdas solo tiene que negociar con Bildu, ERC, BNG y Sumar. Toda política que voten a favor Sumar, BNG, ERC y Bildu obliga a votar a Podemos a favor porque si no se quedarían solos con PP y VOX. No es posible justificar que una medida que vota a favor Bildu no es de izquierdas».
IRENE MONTERO PIDE «VALENTIA» EN IGUALDAD
La hasta ahora ministra de Igualdad, Irene Montero, ha querido pronunciarse sobre las decisiones del nuevo Gobierno de Coalición. Así, Montero ha afirmado durante su intervención en el traspaso de carteras del ministerio que «Pedro Sánchez nos echa de este Gobierno» y ha pedido a su sucesora Ana Redondo que tenga «valentía para incomodar a los amigos de 50 años del presidente del Gobierno».
Con sus declaraciones, la ya ex ministra y ex diputada ha querido seguir la línea que ha mantenido Podemos y que ha marcado Belarra en su carta a sus militantes y no solo se ha distanciado del nuevo Ejecutivo, sino que además ha enumerado los objetivos que ella ha dejado pendientes para la nueva etapa de esta legislatura del reencuentro.