En la era moderna, una sombra silenciosa acecha tras la creciente epidemia de obesidad y diabetes, especialmente entre la población juvenil. El fenómeno alarmante de adolescentes con diabetes tipo 2, una realidad impensable en épocas pasadas, revela la presencia de una amenaza insidiosa: la diabesidad. Este término, que fusiona diabetes y obesidad, se ha convertido en un indicador preocupante de la salud en la juventud actual. Comprender la naturaleza de esta enfermedad y su intrincada conexión con ambas condiciones es esencial para tomar medidas preventivas.
La diabesidad no es simplemente una consecuencia inevitable del estilo de vida actual, sino un llamado de alerta sobre la necesidad de modificar nuestros hábitos. Desde la alimentación hasta la falta de actividad física, nuestros comportamientos cotidianos desempeñan un papel crucial en el surgimiento de esta preocupante realidad. Javier Escalada, director del Departamento de Endocrinología de la Clínica Universidad de Navarra, subraya que, además de los hábitos, factores genéticos también pueden desencadenar esta peligrosa combinación.
3Síntomas comunes, diagnóstico esencial: Descifrando la diabesidad

Los síntomas que se manifiestan son característicos para ambas patolgías. En muchas ocasiones, la clínica no es evidente, y en otras, los pacientes presentan síntomas clásicos como sed excesiva, aumento de la cantidad de orina, pérdida de peso y fatiga. Javier Escalada señala que, en algunos casos, el diagnóstico surge después de haber experimentado complicaciones asociadas a estas enfermedades.
Los expertos aseguran que el diagnóstico es sencillo. Una simple analítica de sangre con valores específicos de peso, altura e índice de masa corporal es suficiente para confirmar la presencia de la diabesidad. No obstante, el uso de técnicas de composición corporal permite obtener resultados más precisos en relación con la obesidad.