Entre los numerosos sonidos que acompañan al otoño, la tos resulta ser uno de los más comunes. En la mayoría de los casos, las infecciones virales son responsables de este síntoma que, aunque a menudo resulta molesto, en realidad es una eficaz defensa de nuestro cuerpo. La tos es un reflejo fisiológico de un mecanismo sumamente complejo en la que deben coordinarse diversas estructuras de nuestro cuerpo en menos de un segundo.
9HIDRATACIÓN CONSTANTE
Mantenerse hidratado y controlar la humedad en el entorno son medidas esenciales para combatir la tos. La sequedad del aire puede ser perjudicial, ya que puede agravar la irritación de la garganta. Para contrarrestar esta sequedad, es recomendable utilizar un vaporizador para aumentar la humedad en el ambiente y para aliviar la sensación de picazón en la garganta. Si te encuentras fuera de casa, es conveniente tener a mano una botella de agua o caramelos para estimular la producción de saliva y combatir la sequedad.
Además, tomar una ducha caliente o un baño de vapor también puede ser una buena medida, porque ayuda a fluidificar las secreciones y aliviar la tos. Prueba a hacerlo antes de irte a la cama y verás como duermes mucho mejor.