Las patatas bravas son, sin duda, un plato icónico de la gastronomía española, especialmente popular en bares y restaurantes de tapas. Estas deliciosas patatas fritas, cortadas en dados grandes, se distinguen por su textura crujiente por fuera y tierna por dentro. El toque característico lo aporta la salsa brava, que es una salsa de sabor fuerte y picante que se vierte generosamente sobre las patatas.
8SE PUEDE CONGELAR

Puedes servir la salsa inmediatamente, mientras esté caliente, para acompañar tus patatas bravas u otros platos. Si no planeas utilizar la salsa de inmediato, deja que se enfríe a temperatura ambiente antes de guardarla en la nevera. Asegúrate de colocarla en un recipiente hermético para mantener su frescura. Puede conservarse en el frigorífico durante aproximadamente una semana sin perder su calidad ni sabor. Si deseas almacenarla por un período más largo, también puedes congelarla en porciones adecuadas en bolsas o recipientes aptos para congelador. Así tendrás salsa brava casera lista para usar en cualquier momento.