La amnistía a Carles Puigdemont, las cesiones a Bildu, la irrupción en el Gobierno en funciones de «ideologías radicales» e incluso «la extrema derecha de Vox» son algunos de los riesgos mostrados por empresas inmobiliarias, metalúrgicas, mineras e incluso de servicios a los inversores de diversos activos financieros, especialmente en el mercado de deuda.
De hecho, la situación es tan delicada que ni Dolores Dancausa, presidenta de Bankinter, ha querido pronunciarse sobre este espinoso asunto. «No puedo, ni debo, ni quiero comentar nada», ha señalado la presidenta del banco naranja.
Las propias empresas consultadas destacan estos riesgos derivados de los resultados de las pasadas elecciones generales y municipales. Y es que, ni las negociaciones del PSOE con Bildu y Junts, como tampoco los pactos autonómicos y municipales del PP con Vox, han pasado desapercibidos a la hora de tomar de inversión.
DE LA EXTREMA DERECHA DE VOX A LA EXTREMA IZQUIERDA DE SUMAR
Son varias las empresas que han advertido de las consecuencias de los resultados de las pasadas elecciones generales, en las que se esperaba la victoria del PP de Alberto Núñez Feijóo, pero insuficiente para poder gobernar incluso asociándose con la «extrema derecha» de Vox, tal y como califica Metrovacesa en un folleto de emisión de deuda de 100 millones de euros.
Por otro lado, el PSOE, al que califica como el partido mayoritario de izquierdas, «obtuvo suficientes escaños para formar un Gobierno», eso sí en coalición con numerosos partidos, entre los que se encuentra la «extrema izquierda de Sumar», Esquerra Republicana de Catalunya y Junts per Catalunya, liderado por Puigdemont, y EH Bildu, al que califican como una formación «perteneciente a la izquierda abertzale que busca la independencia del País Vasco».
existe una importante incertidumbre sobre la demanda de las formaciones independentistas en Cataluña, lo que podría afectar gravemente al mercado inmobiliario residencial
En su recopilación de los hechos, Metrovacesa desgrana por primera vez la situación de la política española en un momento de bloqueo institucional en las máximas instancias y en Las Cortes, sin sesiones de control al Gobierno, y un Ejecutivo en funciones con serias limitaciones para legislar. Además, la inmobiliaria controlada por Carlos Slim y Banco Santander, entre otra firmas, desgrana que Feijóo no obtuvo la confianza de la Cámara Baja para formar Gobierno durante los días 26 y 27 de septiembre.
UN PEDRO SÁNCHEZ EN MANOS DE PUIGDEMONT ENTRAÑA RIESGOS
Tras la fallida investidura, Pedro Sánchez, presidente en funciones, debe ahora buscar los apoyos suficientes para alcanzar una mayoría absoluta en la primera votación de la sesión de investidura o bien una mayoría simple, con más ‘síes’ que ‘noes’ antes del 27 de noviembre, última fecha para fijar la sesión. En caso de no llegar a un acuerdo especialmente con Puigdemont, los españoles volverían a votar el 14 de enero.
«Para tener éxito, busca formar un Gobierno a costa de ceder a las demandas de los partidos políticos separatistas en España», ha detallado a sus inversores. «Entre estas demandas -prosigue- se encuentra la de Carles Puigdemont, líder de Junts y expresidente de la Generalitat de Cataluña, -quien promovió un referéndum ilegal sobre la independencia y una supuesta declaración unilateral de independencia en octubre de 2017-, ha solicitado, entre otras cosas, una amnistía por cualquier presunto acto ilegal relacionado con los hechos ocurridos en octubre de 2017 y un referéndum sobre la independencia de Cataluña». En caso de no alcanzar un pacto, «se volverían a celebrar elecciones generales», ha recordado.
La inmobiliaria señala que España se encuentra inmersa en «frecuentes elecciones» e indica que «los cambios en el liderazgo del gobierno pueden resultar en cambios en políticas económicas y marcos regulatorios». En este sentido, destaca que los «impredecibles resultados electorales y los Gobiernos de coalición pueden introducir incertidumbres que podrían afectar las operaciones y la rentabilidad» de Metrovacesa.
LA INVERSIÓN RECUERDA LOS HECHOS DE 2017 CON UN PUIGDEMONT DESATADO
El riesgo explicado a los inversores es crucial dado que el grupo desarrolla cerca del 17% de su negocio en la Comunidad Autónoma y una vuelta a 2017, como ha prometido Puigdemont a los suyos, pondría en jaque las inversiones y elevaría el nivel de riesgo dado que esta vez se haría de forma unilateral y sin consenso con el Gobierno en último término. Cabe recordar que los delitos que sentaron en el banquillo de los acusados y por los que fueron condenados han sido rebajados por el propio Ejecutivo, allanando así un mayor movimiento separatista y agitando aún más la calle.
«La actividad, negocio, finanzas y el resultado de las operaciones podrían verse afectados negativamente por la incertidumbre política en Cataluña», destaca la firma ante los inversores. El detallado riesgo sobre los independentistas de Puigdemont y ERC muestra así un escudo ante la justicia si se produce una hipotética vuelta del independentismo a las leyes de desconexión del 6 y 7 de septiembre, así como del referéndum del 1-O y la proclamación de independencia, que previsiblemente duraría más de ocho segundos
«La región catalana ha experimentado varios movimientos sociales y políticos que exigen la secesión de la región de España», ha señalado la compañía. En su propio comunicado al mercado, la compañía ha destacado que «existe una importante incertidumbre sobre la demanda de las formaciones independentistas en Cataluña, lo que podría afectar gravemente al mercado inmobiliario residencial, comercial y a la propia demanda de vivienda», ha señalado.
EL NEGOCIO INMOBILIARIO EN CATALUÑA, EN ALERTA POR PUIGDEMONT
Así las cosas, Metrovacesa no descarta un fuerte aumento de las tensiones por la legislación, políticas y otros factores que podrían impactar significativamente el entorno en el que opera en Cataluña y en el conjunto de España. «La continua incertidumbre política en relación a esta cuestión podría afectar negativamente al crecimiento económico general de la región o, más ampliamente, de España, lo que podría tener un efecto material adverso en el negocio, los resultados de operaciones, la situación financiera o la situación financiera de la firma». Además, advierte de los riesgos propios sobre la política en general, las tasas de interés e incluso las secuelas de la pandemia.
La promotora de Carlos Slim y Banco Santander alertan por primera vez de estos riesgos tan detallados sobre Puigdemont, ERC, Bildu y Vox. En 2018, un año después del referéndum y la declaración de independencia, los riesgos se centraron en generalidades, pero sin detallar el proceso.
HASTA LAS MINERAS VEN LAS OREJAS AL LOBO
Minerales y Productos Derivados, Minersa, también ha mostrado estos riesgos ante sus inversores. «El surgimiento de partidos políticos con ideología radical, también podría afectar negativamente la situación económica de la zona del euro y de España, en particular», ha destacado en su folleto de emisión de deuda. La empresa no detalla qué formaciones son ellas ni tampoco apunta a la negociación con Puigdemont ni con ERC, entre otros.
De hecho, apunta que la incertidumbre es de tal magnitud que intentar predecir los riesgos políticos y macroeconómicos es verdaderamente complejo. «Los riesgos pueden ser fuertemente dispersos por factores exógenos, lo que dificulta hacer una predicción confiable sobre la probabilidad de materialización», ha destacado.