Cada región tiene sus dulces tradicionales que son auténticas delicias. En la Comunidad Valenciana, los buñuelos de calabaza son una opción deliciosa y muy apreciada. En el norte, la quesada pasiega es un placer culinario, mientras que en Madrid, los buñuelos de viento son famosos, especialmente durante la festividad de Todos los Santos. Las filloas gallegas y las flores de carnaval extremeñas también son opciones deliciosas en sus respectivas regiones.
Estos dulces tradicionales no solo son sabrosos, sino que también reflejan la rica cultura culinaria de cada área geográfica. Pero hoy queremos centrarnos en los buñuelos de calabaza, porque además nos encontramos en plena temporada de esta verdura de color naranja, así que es el momento ideal para disfrutar de este rico bocado.
6DARLE FORMA A LOS BUÑUELOS
Calienta el aceite la sartén o freidora a fuego medio, evitando que se caliente demasiado para que no se queme el aceite. Sabrás que está listo cuando el aceite comience a humear, lo que indica que ha alcanzado la temperatura adecuada. Para evitar que la masa de buñuelos se pegue a las manos, puedes enharinarlas ligeramente o humedecerlas con agua tibia. De esta manera podremos darles forma con más facilidad.
Toma suficiente cantidad de masa con una mano, como si formaras una pequeña pelota o utiliza una cucharada sopera para medir la cantidad. Luego, usa el dedo pulgar de la misma mano para hacer un pequeño agujero en la masa y así dejar caer la masa en el aceite caliente.
