Las grasas saludables son ciertas grasas que nuestro cuerpo necesita para desarrollarse y funcionar correctamente. Pueden contribuir al, buen funcionamiento de órganos esenciales como el corazón y los ojos, así como permitir el almacenamiento y absorción de ciertas vitaminas. Estas grasas también cumplen un papel importante en la producción de hormonas, juegan un papel en el sistema inmunitario y proporcionan energía para realizar diferentes actividades.
Es importante conocer las diferentes categorías de grasas saludables, dar a conocer sus beneficios para la salud y entender cómo incluirlas en la dieta. Esto es especialmente importante, ya que también hay algunas grasas ‘insalubres’, que están compuestas por ácidos grasos saturados y grasas trans, que pueden llegar a ser nocivas para el organismo y que se deben evitar.
5Ácidos grasos trans
Los ácidos grasos trans, también conocidos como grasas trans, se encuentran en alimentos como bollos, galletas, dulces, algunos alimentos para untar y muchos alimentos envasados. Estas grasas tienen múltiples efectos negativos para la salud, ya que contribuyen a problemas ateroscleróticos, a la obesidad y a enfermedades cardiovasculares.
Los ácidos grasos trans también aumentan los niveles de colesterol LDL (colesterol ‘malo’) en la sangre y reducen los niveles de colesterol HDL (colesterol ‘bueno’). Estos ácidos grasos también aumentan el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer.
Los ácidos grasos trans se producen naturalmente en algunos alimentos como leche, carne y huevos. Si bien estos ácidos grasos son producidos naturalmente por el cuerpo, no deben excederse en las cantidades para evitar los efectos nocivos para la salud.