Las grasas saludables son ciertas grasas que nuestro cuerpo necesita para desarrollarse y funcionar correctamente. Pueden contribuir al, buen funcionamiento de órganos esenciales como el corazón y los ojos, así como permitir el almacenamiento y absorción de ciertas vitaminas. Estas grasas también cumplen un papel importante en la producción de hormonas, juegan un papel en el sistema inmunitario y proporcionan energía para realizar diferentes actividades.
Es importante conocer las diferentes categorías de grasas saludables, dar a conocer sus beneficios para la salud y entender cómo incluirlas en la dieta. Esto es especialmente importante, ya que también hay algunas grasas ‘insalubres’, que están compuestas por ácidos grasos saturados y grasas trans, que pueden llegar a ser nocivas para el organismo y que se deben evitar.
1Ácidos grasos Omega 3
Los ácidos grasos omega-3, son grasas saludables que proporcionan numerosos beneficios. Estos ácidos se encuentran en alimentos como, pescado, nueces, semillas, huevos y algunos vegetales como la espinaca. Los ácidos grasos omega-3 tienen propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir las probabilidades de ciertas enfermedades cardiovasculares, y prevenir problemas digestivos, además de ayudar a regular los niveles del colesterol y la presión arterial.
Uno de los beneficios principales de consumir alimentos ricos en ácidos grasos Omega 3, es que protegen el cerebro y mejoran la función cognitiva. Estos ácidos grasos ayudan a controlar el estrés, los desórdenes emocionales y los problemas de memoria. La investigación ha demostrado que aquellas personas que tienen una dieta rica en Omega 3 tienen un menor riesgo de desarrollar enfermedades mentales relacionadas con la edad.
La mayoría de los expertos recomiendan consumir entre 1000 y 2.500 miligramos de ácidos grasos Omega 3 todos los días, para lograr los mejores resultados. Estos ácidos grasos no pueden ser producidos por el cuerpo, así que hay que obtenerlos a través de los alimentos o los suplementos alimenticios.