Joseph Oughourlian busca reencontrarse con el PSOE de Pedro Sánchez tras sus intentos de acercamiento al PP de Mariano Rajoy hasta la moción de censura de 2018, una votación que parecía perdida por las reticencias del PNV. Los nacionalistas vascos habían aprobado días atrás los Presupuestos, pero aguardaron en silencio para activar su traición.
Por aquellos años, Prisa guardaba un buen trato con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, a la que se camelaron para continuar cerca del poder, pero la fiesta fiesta en el PP una vez consumada la puñalada de los vascos dirigidos por Íñigo Urkullu y Andoni Ortuzar.
El máximo dirigente de Prisa trata ahora de fusionarse con los pasos del PSOE de Pedro Sánchez, al calor de un Gobierno no tiene reparos a la hora de repartir el dinero público, el del contribuyente, y hacerse una foto en un foro organizado por su propio diario en Nueva York, con el presidente del Gobierno en funciones a su derecha.
DE DERECHAS A SER EL MÁS SOCIALISTA DEL PSOE
Este acercamiento contrasta con sus propias declaraciones al asegurar que era «de derechas». La declaración llegó justo después del tortazo socialista en las elecciones municipales y autonómicas del pasado 28 de mayo. El mapa se tiñó de azul y Oughourlian cambió de parecer. Por aquel entonces, las encuestas apuntaban a una mayoría absoluta de Alberto Núñez Feijóo.
El control de los satélites mediáticos, así como su participación en empresas estratégicas pone negro sobre blanco cómo funciona Oughourlian
El francés trató de tender puentes con los ‘populares’. Su influencia en el Gobierno le iba en ello, pero tras las elecciones del pasado 23 de julio, vuelve a ser izquierdas, y muy de izquierdas, como diría el propio Rajoy.
El control de los satélites mediáticos, así como su participación en empresas estratégicas, pone negro sobre blanco cómo funciona el magnate galo. Un cambio en las negociaciones entre el PSOE y Junts podría terminar con una nueva convocatoria electoral, con una cuestión de fondo para el dirigente de Prisa: ¿A qué puerta llamará Oughourlian?
OUGHOURLIAN NO VE LA PRENSA RENTABLE, PERO LA USA PARA SUS FINES
Oughourlian, para quien el negocio de la prensa «no es rentable» tampoco escatima a la hora de organizar foros internacionales con la cabecera principal de su grupo de comunicación, asegura ahora que España vive un «momento especial» en su relación con EE UU y Latinoamérica. En el mismo evento participó el ministro de Exteriores, José Luis Albares, mientras se pagan prebendas a los independentistas vascos, gallegos y catalanes para pisotear la Constitución y especialmente al español en España.
En este aproximamiento al PSOE de Pedro Sánchez, Oughourlian ha despotricado de la anterior cúpula directiva de Prisa, con sonadas salidas de El País y cambios de director. Y es que, en el reino de quien busca acorralar el español, el financiero francés quiere ser más socialista que Pedro Sánchez y su Gobierno en su conjunto, más cuando el partido en su país de origen ha entrado en un declive histórico hasta el punto de ser irrelevante para la política, no sólo nacional sino también internacional, ampliamente superado por Marine Lepen y su Frente Nacional, una formación muy similar a Vox.
Oughourlian ha conseguido expulsar a Juan Luis Cebrián y colocado a Pepa Bueno al frente de El País. No obstante, su huella se refleja en los resultados empresariales y en la cotización del valor. Según el último balance, correspondiente al primer semestre de este año, el principal problema de Prisa es su volumen de deuda y nivel de endeudamiento, hasta cinco veces por encima del Ebitda, una situación peliaguda cuando aprietan los tipos de interés al alza, en el 4,5% en la Eurozona y niveles más elevados en los países donde opera, especialmente en Latinoamérica, como Brasil y México.
LA PRISA DE OUGHOURLIAN, UNA MÁQUINA DE DEUDA
Prisa ha contratado productos de inversión para poder realizar la cobertura ante el alza del precio del euro y de las divisas con las que opera por la mitad de su deuda. El grupo debe 801 millones de euros a la banca y un total de 866 millones, mientras la liquidez se sitúa en apenas 162 millones. Asimismo, perdió un total de 36,3 millones de euros.
Por norma, los resultados empresariales y aún más la gestión suelen reflejarse en la cotización de las acciones. Los accionistas de Prisa que compraron con la llegada de Oughourlian han visto desaparecer 62 de cada cien euros invertidos, un fuerte desplome que deja la acción tiritando en los 0,38 euros. No, Prisa no está a tiro de OPA por ningún otro gran medio de comunicación debido principalmente al grave problema de la deuda. Oughourlian es el principal perdedor con esta inversión, pero la mantiene en el 29,56% desde el pasado mes de diciembre.
PÉRDIDAS MILLONARIAS EN BOLSA DESDE LA LLEGADA DE OUGHOURLIAN
El paquete se acerca al umbral de la opa obligatoria –por encima del 30%- y su valor de mercado alcanza los 111,15 millones de euros. Lejos quedan los días de gloria. Desde su primera entrada, con el 16,396% en 2016, las pérdidas generadas llegan al 85%, una ruina para cualquier inversor si su interés pasa por obtener rentabilidad y Prisa no es rentable, pero tiene un fuerte componente influyente a la hora de usarse como vocero de importantes pactos o suavizar las crisis.
Otros inversores, especialmente Qatar, como Khalid Thani Abdullah al Thani, jefe del banco de Qatar, han reducido su posición desde el 8,17% al 4,92% y certificó su salida del consejo de administración el pasado mes de febrero.
La posición de Oughourlian, por otro lado, no sólo está en sentarse a la izquierda de Pedro Sánchez, sino también tratar de interferir en empresas de la talla de Indra, cuyo consejo cambia en función de los designios del Gobierno. El también director del fondo Amber Capital tiene presencia en la empresa centrada en la tecnología de Defensa y telecomunicaciones, una empresa considerada estratégica por el Gobierno. Amber Capital ostenta el 6,231% de Indra, un paquete suficiente para poder decantar una votación, más cuando se tiene a Prisa como altavoz de los movimientos.
