Cada vez que nos embarcamos en la tarea de limpiar a fondo la cocina, reorganizar los armarios y revisar el contenido del frigorífico, nos encontramos con alimentos que habíamos olvidado por completo, algunos de los cuales han superado su fecha de caducidad: botes de especias, harinas, latas de piña en almíbar, pan rallado, entre otros. A todos nos ha pasado en algún momento. ¿Qué se debe hacer en estas situaciones? ¿Es seguro consumirlos o deberíamos tirarlos directamente a la basura?
7COMER SOLO SI SE HAN RESPETADO LAS CONDICIONES DE CONSERVACIÓN
Es esencial tener en cuenta que tanto la fecha de caducidad como la fecha de consumo preferente son válidas siempre y cuando se respeten las condiciones de conservación indicadas en la etiqueta del producto. Estas condiciones suelen incluir instrucciones sobre la temperatura de almacenamiento y otros factores ambientales.
Además, una vez que se abre un envase de alimento, su duración puede cambiar. La exposición al aire, la humedad y la posible contaminación microbiológica pueden acelerar el deterioro del alimento. Por ello hay que seguir las indicaciones que figuran en los envases donde se sugiere un período específico para consumir el producto después de abrirlo.
