Cada vez que nos embarcamos en la tarea de limpiar a fondo la cocina, reorganizar los armarios y revisar el contenido del frigorífico, nos encontramos con alimentos que habíamos olvidado por completo, algunos de los cuales han superado su fecha de caducidad: botes de especias, harinas, latas de piña en almíbar, pan rallado, entre otros. A todos nos ha pasado en algún momento. ¿Qué se debe hacer en estas situaciones? ¿Es seguro consumirlos o deberíamos tirarlos directamente a la basura?
6ANÁLISIS PARA DETERMINAR FECHAS DE CONSUMO
Para determinar el período durante el cual un alimento se mantiene en buen estado de conservación, los fabricantes realizan estudios de vida útil. Estos estudios incluyen análisis microbiológicos, físicoquímicos y sensoriales para evaluar la evolución del alimento con el tiempo. Esto permite establecer una fecha de duración que debe aparecer en el etiquetado del producto. Hay dos formas principales de fechas de duración: fecha de caducidad y fecha de consumo preferente, dependiendo del tipo de alimento y su seguridad para el consumo.