El truco más sorprendente (comprobado científicamente) para dejar de sentir hambre

La obesidad ciertamente representa un desafío importante para la salud a nivel mundial. Se estima que más de 650 millones de personas están afectadas por esta enfermedad. Si bien la obesidad es una afección compleja influida por múltiples factores, la dieta juega un papel fundamental en su desarrollo. El exceso de ingesta calórica, el consumo excesivo de grasas saturadas y azúcares, junto con otros aspectos como la falta de actividad física, pueden contribuir al aumento de peso y al desarrollo de la obesidad.

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PROBLEMAS CON LA SEÑAL DE SACIEDAD

La sensación de saciedad está regulada por un sistema complejo que involucra señales hormonales, neurológicas y psicológicas. Cuando comemos, el estómago se estira a medida que se llena de alimentos, lo que envía señales al cerebro a través de las hormonas y los nervios para indicar que estamos llenos y que debemos dejar de comer. Sin embargo, en algunas personas, esta señal parece no ser tan efectiva como debería ser.