La vida moderna se caracteriza por una fatiga generalizada, estresante entorno de trabajo y la falta de una adecuada alimentación. Estos factores pueden tener un efecto negativo en nuestro sistema inmune, algo que resulta más evidente durante la primavera, cuando los cambios de clima y el aumento de virus en el aire incrementan el riesgo de enfermedades relacionadas. Ya sea que estemos listos para combatir enfermedades o simplemente queremos prevenirlas mediante un ejemplo.
La alimentación es una de las principales formas para fortalecer nuestro sistema inmune. A continuación conocerás los principales cambios en la alimentación que podemos implementar para contar con un mejor sistema inmunitario.
3Carbohidratos y mono ácidos grasos esenciales
Los carbohidratos son esenciales en nuestra dieta para ayudarnos a combatir luchas infecciones, especialmente los carbohidratos simples tales como la glucosa. De hecho, los carbohidratos simples pueden aumentar la actividad de los glóbulos blancos, que son las células de defensa del sistema inmune. Además, los carbohidratos complejos disminuyen el estado de estrés del cuerpo, que reduce la probabilidad de contraer enfermedades. Estos incluyen alimentos como el pan, la pasta, el arroz y los cereales.
Los ácidos grasos esenciales y los aceites monoinsaturados como el aceite de oliva, ayudan identificar y destruir las células cancerígenas, mientras que los ácidos grasos omega-3 tienen un gran efecto en el sistema inmune, permitiendo la producción de células sanguíneas. Estos ácidos grasos esenciales también ayudan a reducir las inflamaciones, lo que es importante en el control de las enfermedades autoinmunes.
