Te invitamos a descubrir el irresistible mundo del bizcocho borracho, una joya culinaria que puedes disfrutar en tan solo 30 minutos. Originario de Guadalajara, España, este pastelito es uno de los productos más emblemáticos de la región, junto con la miel de Alcarria.
Este bizcocho, como su nombre lo indica, se empapa con un almíbar a base de vino dulce, lo que le confiere su característico sabor y textura jugosa. Su historia se remonta al siglo XIX, cuando estos «pastelitos borrachos» empezaron a ganar fama en todo el país, convirtiéndose en un producto turístico de compra obligada al visitar la zona. Cada porción se presenta de manera individual, envuelta en su papel o cápsula, similar a una magdalena alargada.
Su sabor suave y dulce, donde el alcohol no molesta en absoluto, lo convierte en el complemento ideal para una merienda o para acompañar tu café. La receta es tan fácil como la de un bizcocho común, con el único secreto de preparar un almíbar perfecto para empapar cada bocado.
1Ingredientes para un delicioso bizcocho borracho en 30 minutos
¿Te gustaría deleitarte con un auténtico bizcocho borracho en la comodidad de tu hogar? Buenas noticias: ¡es más sencillo de lo que crees! Todo lo que necesitas son ingredientes básicos y un poco de tiempo. Para el bizcocho en sí, requieres 5 huevos medianos, 125 gramos de harina de repostería y 220 gramos de azúcar. Y no te preocupes, ¡la decoración es igual de fácil! Solo necesitas una cucharadita de canela y una cucharada de azúcar para darle ese toque final irresistible.
Pero la verdadera clave de este bizcocho está en el almíbar. Combina 300 mililitros de agua, 150 mililitros de vino dulce de Montilla o Moriles y 60 gramos de azúcar para crear un almíbar que embriagará tu bizcocho con su sabor único.
