Nutrición deportiva: 7 consejos para optimizar tu alimentación

No hay ninguna duda de que el famoso concepto «come bien, vive bien» naces de la importancia que otorgamos a la alimentación diaria. En la nutrición deportiva esta misma filosofía se aplica, aunque con un ligero enfoque diferente. Si queremos lograr los mejores resultados en el rendimiento físico, es importante prestar especial atención al tipo de alimentos que consumimos.

Un buen régimen de alimentación también ayuda a prevenir problemas de salud, como enfermedades del corazón, diabetes y problemas de hígado. Así mismo, los alimentos ricos en nutrientes pueden ayudar a prevenir lesiones, mejorar el sistema inmune y reducir el tiempo de recuperación.

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Qué alimentos comer antes, durante y después del ejercicio

Cada persona necesita una cantidad de alimentos diferente dependiendo del tipo de deporte que practica y de su metabolismo. Lo primero que hay que entender es que, los alimentos que tienes que comer de acuerdo al deporte dependen del momento de la actividad.

Antes del entrenamiento, es importante comer alimentos ricos en carbohidratos porque le darán al cuerpo la energía necesaria para el ejercicio. Los alimentos ricos en carbohidratos son los cereales, patatas, panes, arroz y frutas. Un buen desayuno antes del entrenamiento debería incluir una pequeña cantidad de proteínas y una gran cantidad de carbohidratos.

Durante el entrenamiento, es importante ingerir líquidos suficientes para mantenerse hidratado y alimentos con carbohidratos para mantener la energía a lo largo del ejercicio. Los deportistas a menudo consumen bebidas isotónicas y energéticas durante el entrenamiento para mantenerse hidratados y nutridos.

Después del entrenamiento, es importante proporcionar al cuerpo los nutrientes necesarios para ayudar en la recuperación. Los alimentos ricos en proteínas juegan un papel importante en la recuperación muscular. Además, los alimentos ricos en carbohidratos también ayudan a proporcionar energía al cuerpo después del entrenamiento. Los alimentos ricos en potasio y magnesio también son importantes para ayudar en la recuperación.