La Presidencia del Consejo Europeo está en manos de España desde el pasado mes de julio hasta final de año, a pesar de la situación política del país. No es la primera vez que esta dirección se lleva a cabo por un Estado que se encuentra inmerso en un cambio de Ejecutivo. Sin embargo, la expectación sobre las posibles formaciones de Gobierno y la actualidad de los partidos están haciendo de la Presidencia del Consejo Europeo un tema «menor» en las portadas de los medios de comunicación, lo que también supone una falta de información sobre los gastos que ha llevado a cabo el Ejecutivo, ahora en funciones, de Pedro Sánchez.
Antes de la convocatoria electoral, la Presidencia del Consejo Europeo era una de las fechas para la que el Gobierno de Coalición se ha estado preparando durante los dos años anteriores. Además de la organización de todos los eventos que forman parte de esta cita europea, el actual Ejecutivo ha estimado un gasto en regalos promocionales para sus asistentes por el valor de 698.882,50 euros. Así lo detalla el contrato dividido por lotes publicado en el portal de Contratación Pública al que ha tenido acceso Moncloa.com, donde justifica esta inversión en la «necesidad de adquirir los productos que serán objeto de regalo durante la PEUE.
Para contentar a los invitados, el ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática dirigido por Félix Bolaños, ha considerado necesario comprar materiales promocionales de todo tipo, entre los que destacan 38.000 «pines promocionales», 50.000 cuadernos y bolígrafos de la PEUE, 10.250 Botellas de agua reutilizables, 1.100 paraguas, 3.300 abanicos o 21.000 ejemplares de fulares diseñados para la ocasión. Este último regalo ha sido el el más caro de todo el material publicitario, con un valor estimado que ronda los 22 euros la unidad y que ha sido asignado por un valor total de 320.038,95 euros.
Los regalos en números: más de 150.000 euros en material de oficina
Además del gasto de más de 320.000 euros en fulares, el contrato marco incluye otros seis lotes más de productos promocionales destinados a que los asistentes puedan llevarse un recuerdo, o varios, de su asistencia a los eventos del Consejo Europeo. Junto a este gasto, el Ejecutivo ha invertido 31.363,2 euros en 7.200 bolsas de tela con el logotipo de la PEUE 2023; 41.382 euros en pines promocionales con el logo «en relieve esmaltado» o 4.192,65 euros en 5.500 identificadores de equipaje.
En los pliegos técnicos de este contrato y en las diferentes adjudicaciones también se puede encontrar que el Gobierno de Sánchez ha invertido 151.637,2 euros en material de oficina para un total de 104.000 bolígrafos y cuadernos de diferentes tipos, con logos de la Presidencia o del Consejo Europeo. Además, las 10.250 botellas de agua reutilizables han supuesto un gasto de 18.355,76 euros procedentes de las arcas públicas, mientras que los 1.100 paraguas y los 3.300 abanicos han costado un total de 10.146,88 euros.
La Presidencia del Consejo Europeo: un evento al que Pedro Sánchez no ha llegado a tiempo
A pesar de que la Presidencia del Consejo Europeo comenzara el 1 de julio, la formalización de este contrato se publicó de manera en oficial en el Boletín Oficial del Estado el pasado 21 de agosto de 2023 y aparece como «parcialmente resuelta» en el Portal de Contratación Pública. Así, este contrato de regalos promocionales se suma a otras adjudicaciones del Ejecutivo de Pedro Sánchez que no han sido gestionados con la previsión suficiente para estar formalizados antes del inicio de la Presidencia.
Como ya informó Moncloa.com, el Ejecutivo llegó a publicar un contador en la página oficial de la Presidencia del Consejo Europeo que se inició cuando aún quedaban dos años para el evento. Sin embargo, el Gobierno no ha llegado a tiempo en la planificación y ha terminado usando métodos de urgencia para la contratación de servicios, lo que le ha permitido adjudicar «a dedo» la organización de los actos de diferentes ministerios. Este es el caso del ministerio de Igualdad de Irene Montero, quien adjudicó mediante «declaración de urgencia» la contratación sin licitación abierta de los servicios de los tres eventos que le correspondían. A esta «moda ministerial» se sumó el ministro Albares, quien adjudicó dos contratos sin publicidad por un valor total de 182.189 euros.
