Durante la temporada de verano, es más común experimentar trastornos intestinales, como la gastroenteritis y el estreñimiento, que están estrechamente relacionados con esta época del año. Estos problemas de salud se deben en gran medida al aumento de las temperaturas, que favorece la descomposición de los alimentos y, por ende, la proliferación de infecciones. Además, factores como los cambios en los horarios y la dieta también contribuyen a estos trastornos.
6CUÁNDO DEBEMOS PREOCUPARNOS
Hay algunos indicadores durante el proceso de gastroenteritis que pueden ser señales de alarma. Por ejemplo si se prolonga más de 4 días, si la fiebre sube de los 38 °C, si hay una fatiga excesiva, si hay vómitos y el organismo no admite hidratación o si hay sangre en las heces y la orina se vuelve oscura. En esos casos, es conveniente acudir a un centro de urgencias. También los niños y los ancianos requieren atención médica, ya que se pueden deshidratar rápidamente.