El pan de gambas, también conocido como keropok o galletas de gambas, es un popular aperitivo que a menudo se sirve en restaurantes chinos. Se caracteriza por su forma de corteza redondeada y su color blanco, aunque se pueden ver de diferentes colores. Es un bocado crujiente que a todos nos resulta irresistible, y que podríamos comer sin límites. Muchas personas piensan que es un producto de elaboración tan compleja que solo se puede comprar en su versión industrial; sin embargo, es posible hacer estos ricos snacks en casa, ¿te atreverías?
7HACER RODAJAS Y FREÍR
Utilizamos un cuchillo de hoja plana y muy afilado, realizamos cortes de aproximadamente 2 milímetros de grosor en la masa. Una vez que hayamos realizado las rebanadas, las colocamos sobre papel absorbente durante unos 30 minutos para que se sequen y estén listas para freír. Preparamos una sartén o freidora con abundante aceite caliente. Luego, comenzamos a introducir las rebanadas de masa, preferiblemente de dos en dos, para evitar que el aceite se enfríe.
Es importante que cada rodaja de masa quede completamente sumergida en el aceite; si es necesario, podemos ayudar empujándolas con una espumadera. Cada lado de las rebanadas debe freírse durante aproximadamente 20 segundos, o incluso menos. Al retirar las rebanadas del aceite, las colocamos sobre papel absorbente para que escurran el exceso de aceite. Ya tenemos listo nuestro pan de gambas casero.