lunes, 25 noviembre 2024

El Rey apuesta por perder el tiempo y encarga a Feijoo una investidura «imposible»

Pedro Sánchez ha intentado con todas sus fuerzas que Felipe VI eligiera su candidatura como propuesta para la investidura. Sin embargo, no haber conseguido unos acuerdos públicos antes de su cita con el monarca le ha costado no ser elegido. Así, el Rey ha querido mirar hacia el otro lado del Hemiciclo y ha decidido proponer al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, para que se someta al debate de investidura, tras la ronda de consultas que ha realizado este lunes y martes con las siete formaciones del Congreso que han querido acudir al Palacio de la Zarzuela.

Por primera vez, el Jefe del Estado se ha enfrentado a la situación inédita de tener dos aspirantes a ser nominados: Alberto Núñez Feijóo, cuya lista fue la más votada de los comicios del 23 de julio y que cuenta con el apoyo comprometido de 172 diputados de cuatro partidos (PP, Vox, CC y UPN), y el socialista Pedro Sánchez, quien se ve capaz de tejer alianzas para lograr una mayoría absoluta como la que le permitió controlar la Mesa del Congreso hace una semana.

Sin embargo, «verse capaz» no ha sido suficiente para Felipe VI y este martes por la tarde el monarca ha convocado en Zarzuela a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, para comunicarle su decisión de proponer a Feijóo. Seguidamente, la recién elegida para presidir la Cámara Baja ha comunicado a los medios de comunicación su ratificación de la propuesta Real y ha afirmado se pondría inmediatamente en contacto con el candidato del Partido Popular para informarle de la decisión del Rey y para fijar la fecha en la que se llevará a cabo una investidura en la que Feijoo no tiene posibilidades de ser investido presidente.

4 escaños para gobernarnos a todos

El candidato Popular no ha tardado en agradecer al Borbón su decisión y ha prometido dar voz a aquellos que quieren «cambio» y «estabilidad». Sin embargo, Alberto Núñez-Feijoo se encamina a un debate de investidura en el que no cuenta con los apoyos suficientes para salir investido. Por mucho que el grupo del Partido Popular haya instado en diferentes ocasiones al PNV, Aitor Esteban se ha negado a todas ellas, asegurando que su partido no irá en el mismo equipo en que está el partido de ultraderecha de Santiago Abascal.

Por tanto, el candidato gallego se presentará a la investidura sabiendo que no llega a la mayoría absoluta. Aún así, horas antes de haber sido elegido por el Rey, Feijoo ha afirmado en rueda de prensa que el Partido Popular tiene 172 escaños, frente a un PSOE que, según el candidato popular, «está a la distancia de una amnistía, de un referéndum de independencia y de oficializar la desigualdad entre los españoles». Sin embargo, Feijoo sabe que esos 4 diputados que le faltan son claves para conseguir llegar a la Moncloa y que, conseguirlos, pasa por convencer a políticos de otras formaciones, un hecho difícil de conseguir.

El Gobierno de Feijoo: 4 «tamayazos» y una Mesa del Congreso socialista

Existen muy pocas posibilidades de que Núñez-Feijoo supere el debate de investidura y consiga ser investido presidente de España. Para ello, tendría que conseguir que 4 «tránsfugas» del PSOE le dieran su apoyo para la mayoría absoluta, produciéndose así el fenómeno conocido como tamayazo, lo que supondría no respetar la cohesión de los grupos parlamentarios que se han conformado con respecto a los resultados del 23 de julio. En el caso de que Feijoo no consiga estos 4 apoyos que necesita, el gallego se enfrentaría 48 horas después a una votación en la que, para ser presidente, necesitaría una mayoría simple de «síes».

Suponiendo que esto llegara a ocurrir, hecho muy poco probable ya que, aunque Feijoo no lo termine de admitir como hizo Mariano Rajoy en 2016, el PP no cuenta con los suficientes apoyos; el Gobierno de Núñez-Feijoo no podría destacar por esa «estabilidad» que él mismo prometió este pasado martes. Si Feijoo llega a presidente del Gobierno, su siguiente gran batalla sería la de intentar legislar con la Mesa del Congreso gobernada por el PSOE y con un Hemiciclo en el que seguiría sin contar con los apoyos suficientes para poder sacar adelante cuestiones como los Presupuestos del Estado de cada año. Así, aunque Feijoo cuente con mayoría absoluta en el Senado, sus posibilidades para ser presidente de España pasa por hacer promesas a quien ha negado en todo momento mirar o por convencer a quien no tiene «permitido» cederle su voto.

Imprimir