En el ámbito de la salud, la alimentación desempeña un papel fundamental como medida preventiva para mejorar cualquier aspecto relacionado con la salud cardiovascular. Muchos estudios han demostrado los beneficios de una dieta baja en carnes rojas para reducir el riesgo de ciertos problemas de salud.
Esta dieta, además de ayudar a controlar la presión arterial, también mejora el colesterol y la glucemia, evitando también el riesgo de enfermedades metabólicas.
2Qué alimentos se deben priorizar para seguir una dieta baja en carnes rojas
Para seguir una dieta baja en carnes rojas se deben consumir en primer lugar alimentos ricos en proteína vegetal como las legumbres, los frutos secos, los huevos y los granos enteros. Estos alimentos tienen un alto contenido de aminoácidos y son una fuente excelente para satisfacer las necesidades nutricionales del organismo sin aportar un alto volumen de grasas y calorías.
Se debe evitar, entre los alimentos ricos en proteína, el consumo de carnes como res, cerdo, aves y caza. Estos alimentos aportan grasas saturadas y colesterol que son nocivos para la salud a largo plazo. En cambio, se debe apoyar en el consumo de pescados azules para suplementar un 33% de la ingesta proteica diaria.