Cuando el calor aprieta cualquier forma de matar el calor es buena. Al igual que muchas personas se sienten atraídas por la idea de ir a la playa, calcinarse al sol y beber mojitos, otros prefieren la tranquilidad de las piscinas naturales. O sea, ir a ríos y lagos que, además de ofrecer una alternativa al calor abrasador permiten que disfrutes de un paisaje inolvidable. Este verano puede ser completamente diferente a lo que has vivido hasta ahora y, sin duda, digno de recordar. Muy atenta/a porque aquí te dejamos las alternativas más chulas.
4Barranco Blanco. Coín (Málaga)
El Alaminos, principal afluente del río Fuengirola, se desboca sobre el Barranco Blanco. Allí se forma una poza idílica en la que puedes darte el chapuzón de tu vida. Si prestas atención puedes ver nutrias y barbos, así que te conviene no molestarlos demasiado. A veces pensamos que para ver lugares espectaculares hace falta salir de nuestro país, pero lo cierto es que tenemos espacios paradisíacos muy cerca y al alcance de todos. Detenerse unos minutos a ver cómo el agua recorre su curso no se compara con absolutamente nada. Es mejor que hacer cualquier terapia.