Desde 1999, los triángulos de emergencia se han vuelto una pieza indispensable en nuestros maleteros. En aquel entonces, se estableció la obligatoriedad de colocarlos a 50 metros del vehículo en caso de un accidente o avería en carretera, asegurándose de que fueran visibles a una distancia de 100 metros, tal y como se especifica en el Reglamento General de Circulación.
6EL PELIGRO DE LOS TRIÁNGULOS
La DGT ha tomado en consideración el riesgo que implica para los conductores el acto de colocar los triángulos de emergencia en vías rápidas o autopistas. El riesgo de ser atropellado mientras se camina hacia la distancia mínima de 50 metros para señalizar un accidente o avería en carretera ha llevado a la implementación de medidas alternativas, como el uso de luces V-16.
La decisión de la DGT se basa en la seguridad vial y en la protección de los usuarios de las carreteras. Al eliminar la obligatoriedad de colocar triángulos en vías rápidas, se busca reducir la exposición de los conductores a situaciones de peligro al encontrarse fuera de sus vehículos en áreas de alta velocidad.