Mucho se ha debatido sobre si es saludable o no el hábito de dormir la siesta. La respuesta depende de diferentes factores como el individuo sus genes y sus hábitos diarios. Sin embargo, gracias a un equipo de investigadores internacionales liderados por el University College London (UCL), ahora sabemos que tener inclinación a tomar siestas está asociado con un cerebro de mayor tamaño.
7ESTUDIOS CONTRADICTORIOS
La siesta y sus efectos en la salud han sido objeto de diversas investigaciones, y los estudios anteriores han arrojado conclusiones contradictorias en algunos casos. Un estudio publicado en marzo de 2022, por ejemplo, encontró que el cansancio diurno excesivo podría estar asociado con trastornos neurodegenerativos como la demencia.