Desde muy pequeños nuestros padres siempre nos decían que teníamos que estudiar para ser alguien en la vida. Sin embargo, cuando vamos creciendo nos damos cuenta de que hay instancias en las que la formación no lo es todo.
Hay estrellas brillando en la televisión y los eventos más importantes del mundo que nunca llegaron a terminar sus estudios. Su talento y disciplina supo suplir la falta de conocimientos básicos. Hicieron grandes sacrificios que los llevaron a ser envidiados y amados en todo el mundo.