La palabra «albóndiga» tiene su origen en el término árabe «al-bunduqa», que significa «la bola». Los árabes introdujeron esta preparación de bolas de carne a los europeos, y se extendió su consumo y popularidad. El historiador granadino Luis del Mármol, en su obra «Descripción general de África» publicada en 1573, menciona el término albóndigas al describir algunos alimentos que se vendían en la época. Según su relato, las albóndigas se preparaban con carne picada y especias, luego se freían en aceite.
8AGREGAR LAS ALBÓNDIGAS Y DISFRUTAR
Regresamos la salsa a la sartén y añadimos las albóndigas previamente preparadas. Cocinamos a fuego bajo durante unos minutos, revolviendo suavemente, hasta que las albóndigas se calienten por completo. Para finalizar, rompemos una de las albóndigas para verificar el punto de cocción. Si es necesario, continuamos cocinando hasta alcanzar el punto deseado. Luego, ligamos la salsa con un chorretón de aceite de oliva para darle brillo y sabor.