Siete pilotos de caza del Ejército del Aire y del Espacio, cuatro pertenecientes al Ala 11 y tres al Ala 14, han superado con éxito el curso de conversión operativa al avión de combate Eurofighter, realizado en la Base Aérea de Morón de la Frontera, Sevilla.
El Eurofighter es un avión de combate de cuarta generación diseñado y fabricado en Europa. Los sesenta y nueve aviones operados por nuestra fuerza aérea han sido ensamblados por Airbus en su factoría de Getafe (Madrid). Allí se siguen modernizando para mantenerlos siempre actualizados y muy pronto comenzará a ensamblarse una nueva serie de veinte cazas que sustituirán a los veteranos F-18 en la salvaguarda de los cielos de las Islas Canarias.
Una formación muy exigente
Los alumnos, que ahora se gradúan como pilotos de Eurofighter, han pasado previamente cinco años de formación en la Academia General del Aire de San Javier (Murcia). En ella, tras superar los dos primeros cursos, se iniciaron en el vuelo en su tercer año con las avionetas Tamiz. En ellas realizaron el curso de vuelo elemental. En cuarto curso pasaron al reactor de fabricación española C-101, con el que se realiza la formación de vuelo básica. Finalmente, solo los que mostraban mejores capacidades para llegar a ser pilotos de combate, pasaron en quinto curso a la Escuela de Caza y Ataque de Talavera La Real (Badajoz). Allí vuelan el F-5M en misiones de combate aéreo y de ataque a tierra. Superado este curso y tras obtener sus despachos de teniente se incorporaron a las unidades de caza. Pero la formación para un piloto de combate no termina ahí. De sus unidades pasan a los escuadrones de conversión operativa. El del F-18 es el 153 Escuadrón del Ala 15 y vuela desde la base aérea de Zaragoza y el de Eurofighter es el 113 Escuadrón del Ala 11 de Morón. Ambos escuadrones de conversión operativa vuelan aviones biplazas que permiten que el aspirante a piloto de combate vuele siempre con un instructor.
El 113 Escuadrón
Tras nueve meses de intenso trabajo y sacrificio en el 113 Escuadrón del Ala 11, para superar los exigentes planes de instrucción de forma satisfactoria, los pilotos han alcanzado la calificación de aptos para el combate con limitaciones (Limited Combat Ready) en ese avión de caza. Este escuadrón, con indicativo radio “gallo”, es el escuadrón de instrucción responsable de la formación inicial en Eurofighter de todos los pilotos españoles de Eurofighter. La excelencia del Centro de Instrucción, que opera tres simuladores de última generación, en un gran edificio ubicado en el interior de la propia base aérea de Morón, combinada con la formación en vuelo de alto nivel que proporcionan los instructores del 113 Escuadrón, un grupo de instructores con una gran experiencia, consiguen que los pilotos de caza que reciben el “apto para el combate” puedan incorporarse con todas las garantías a los escuadrones operativos.
El 113 Escuadrón, además de formar a los pilotos de Eurofighter de nuestro Ejército del Aire y el Espacio, forma a pilotos de otras fuerzas aéreas como la Luftwaffe alemana o la Real Fuerza Aérea Saudita. Estas naciones confían la formación de algunos de sus pilotos de Eurofighter a nuestra fuerza aérea en virtud de acuerdos de colaboración a los que se ha llegado gracias al prestigio alcanzado por nuestros instructores durante estos casi veinte años en los que el Eurofighter lleva volando con la cruz de San Andrés.
De vuelta a las unidades de caza
Durante la formación continua de los pilotos de caza lograr este hito, obtener la calificación de Combat Ready, aunque aún sea con limitaciones, tiene una gran relevancia. La obtención de esta calificación operativa les permite volver a sus unidades de combate y continuar con su progresión formativa dentro de los escuadrones operativos de las unidades usuarias de Eurofighter, que son el Ala 14 basada en Albacete y la propia Ala 11 de Morón de la Frontera. Además, los nuevos pilotos de este sistema de armas pasan a formar parte de una comunidad exclusiva que, aunque exige una gran dedicación y esfuerzo, les hace estar orgullosos de pertenecer a ella.
El pasado uno de junio tuvo lugar el acto de clausura del curso, un acto que presidió el jefe del Ala 11, coronel Enrique Fernández Ambel, y al que asistió personal de Airbus e Indra, que también colaboran en el proceso de formación de nuestros pilotos de combate, principalmente en el centro de simulación. Tras él, los siete nuevos pilotos de combate marcharon a sus unidades donde continuarán su formación hasta alcanzar el máximo nivel operativo, que la OTAN denomina Combat Ready 3. Pero hasta entonces les quedan muchos años de aprendizaje y muchas horas de vuelo en sus Eurofighter. ¡Buen vuelo!, aviadores.