El presidente del Grupo Prisa, Joseph Oughourlian, ha sufrido una epifanía política. Casualmente ha coincidido con las elecciones del pasado 28 de mayo en las que el Partido Popular ha arrasado a costa de un PSOE impotente que ha perdido casi todas las autonomías del país. El responsable de medios como El País o la Cadena SER, extensiones informativas del Gobierno durante esta legislatura, se ha vuelto de derechas. Al menos es el mensaje que ha mandado a todo el sector de capital riesgo al reunirse con el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, poco antes de las elecciones para «tender puentes». Oportunismo es poco. Pero no le ha salido gratis la reunión.
El propietario del 29,9% del Grupo Prisa tampoco hizo demasiado caso a las encuestas del CIS de José Félix Tezanos, pero sí a las de los demás. En cuanto vio el escenario que se le venía encima, casualmente dio un giro ideológico de 180º para acercarse a Feijoo. El presidente del Partido Popular mantuvo un encuentro con el máximo accionista de Prisa a petición de Joseph Oughourlian para ver la forma de «tender puentes», tal y como ha publicado el diario El Confidencial. La idea era prepararse para el nuevo escenario político y sobretodo «adelantarse» a Vivendi o Mediaset ante la posibilidad de que se hicieran con más capital y más control del dinero que reparte el Gobierno a nivel institucional. La llegada del PP augura no solo una epifanía política para Joseph Oughourlian, sino también para Pepa Bueno, directora de El País, o Angels Barceló, una de las periodistas más reconocidas del grupo.
Desde que Pedro Sánchez se dio cuenta de que su divorcio con El País y la Cadena SER no era una buena idea, todo cambió en la estructura de estos periódicos. La llegada del marido de la exministra de Defensa Carme Chacón, Miguel Barroso, a los mandos del Grupo Prisa ayudó considerablemente al Gobierno a conseguir mejor prensa. Pero este idilio ha sido al parecer cosa del pasado. Ahora, Joseph Oughourlian se ha dado cuenta de que es de derechas después de una legislatura ayudando con empeño a dictar la línea editorial de El País o la Cadena SER. La reunión con Alberto Núñez Feijoo ha dejado anonadados a todos los empresarios e inversores que componen el sector del capital riesgo, quienes entre risas dedican sus mensajes de Whatsapp y sus chascarrillos diarios a Joseph Oughourlian, reciente fichaje de la derecha.
Oughourlian se reúne con Bendodo
Hay quien lo tacha de «patético» y quien directamente ha tenido material suficiente como para lanzar todo tipo de chascarrillos. Esta reunión, que Joseph Oughourlian esperaba que pasara completamente desapercibida, se ha convertido en la comidilla del sector capital riesgo, donde ven al presidente del Grupo Prisa como el hazmerreír del sector por su cambio de ideología a cuenta del resultado de las elecciones. Lo que hizo Joseph Oughourlian con el diario El País y la Cadena SER con la ayuda inestimable de Barroso será recordado por todos. El control editorial, confirmado por fuentes internas del diario digital, acompañado de este giro de guion no ha pasado desapercibido para nadie… y mucho menos para el prestigio de este magnate de origen armenio.
La mala noticia para Joseph Oughourlian es que el Partido Popular no olvida. Pese a que el presidente del PP accedió a este encuentro motivado por el inminente resultado electoral, hay dirigentes populares de calado como Elías Bendodo o Juan Bravo que son muy conscientes de cómo se ha portado Joseph Oughourlian con el PP y cómo ha tratado al Gobierno de Pedro Sánchez. Como si del Costa Concordia se tratara, el presidente del Grupo Prisa ha tomado la iniciativa mientras el PSOE se hunde sin paliativos para intentar que su bote salvavidas tenga acogida en Génova, pero Bendodo y Bravo le han cogido la matrícula al responsable de este grupo de medios tan afín (al menos en los últimos años) al Gobierno.
El problema añadido es que no solo se ha reunido con el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, para tender puentes en un momento marcado por el hundimiento del PSOE. El verdadero problema es que Joseph Oughourlian está tan desesperado con el posible cambio de signo del Ejecutivo que antes ya se había reunido con Elías Bendodo, coordinador general del Partido Popular, y con Juan Manuel Moreno Bonilla, el presidente de la Junta de Andalucía. Que Joseph Oughourlian quiere amigos no lo duda nadie, pero su epifanía política ha sentado mal incluso entre los periodistas del grupo que sí que intentan hacer su trabajo de la mejor manera posible.