La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha solicitado a Netflix que modifique «con urgencia» su nueva estrategia de cuentas compartidas y contraseñas al considerar que, entre otras cosas, «choca» con el modelo actual de familia.
Ante las implicaciones prácticas que esta política pueda plantear, la organización se ha dirigido a la plataforma, a través de Euroconsumers, para trasladar la preocupación de los consumidores respecto al concepto de hogar/familia de Netflix en la actualidad.
Los nuevos términos requieren que los usuarios designen una ubicación principal usando su televisor, que debe iniciar sesión con la cuenta del usuario y conectarse a la misma red Wi-Fi que todos los demás dispositivos asociados con esa cuenta.
En ausencia de una ubicación principal o TV designada, Netflix asignará automáticamente una según la dirección IP del usuario, las identificaciones del dispositivo y la actividad. Para mantener la asociación con la ubicación principal, los usuarios deben conectarse a la red Wi-Fi designada, abrir la aplicación o la web de Netflix y ver al menos un programa cada 31 días.
Los usuarios que deseen usar Netflix en un dispositivo que no esté asociado con su ubicación principal pueden solicitar la verificación del titular de la cuenta principal.
OCU considera que esta propuesta choca con la forma en que se componen y funcionan los hogares en la actualidad. «La familia clásica, viviendo en una misma casa, todos los días de la semana ya no es una realidad tan habitual. Esto ocurriría con un ejemplo de una familia de cuatro, con dos estudiantes que se quedan en otra ciudad», ha justificado la organización.
Según la entidad, cada vez que los dos jóvenes quisieran conectarse a la cuenta familiar de Netflix, cada uno desde la residencia diferente y cada uno en un momento diferente del día o de la noche, al menos uno de los padres tendría que confirmar el acceso desde su móvil. O si es el caso de una persona que está e viaje por un largo periodo de tiempo y lleva un dispositivo que rara vez se usa en su hogar. En ese caso, debe solicitar al titular de la cuenta principal que verifique el dispositivo.
Luego, el titular de la cuenta recibirá un código que se le puede proporcionar a la persona que viaja, después de esto, el miembro de la familia que viaja puede acceder a Netflix por un período de siete días.
«¿Pero qué ocurre después de eso? ¿Es necesario repetir el proceso una y otra vez? ¿Es posible realizar múltiples solicitudes de códigos temporales? Estos dos ejemplos, entre otros ilustran el impacto tangible de la nueva política en los clientes de Netflix y cómo se evita la compleja realidad de muchas familias actualmente».
Por ello, OCU considera que la carga administrativa creada para los suscriptores de Netflix supera el daño que la compañía afirma estar abordando y, por lo tanto, «debe considerarse desproporcionado».
Por otro lado, no está claro cómo los consumidores que pagan significativamente más para tener acceso a múltiples pantallas generarían abuso al acceder a estos en diferentes ubicaciones.»Los consumidores que pagan por cuatro pantallas deberían tener acceso a cuatro pantallas independientemente de dónde se encuentren», entiende la organización.
Otro de los aspectos que ha levantado las dudas de la plataforma es el impacto de la política de contraseñas de Netflix en la privacidad de los consumidores. «La estrategia de la nueva cuenta de Netflix no solo plantea dudas sobre el impacto en la privacidad del seguimiento continuo de direcciones IP, sino que también pone en peligro el derecho de los consumidores a navegar de forma anónima utilizando una VPN», considera la organización.
Según la OCU, los consumidores quieren proteger su privacidad y navegar sin ser monitorizados por los proveedores de internet, las empresas de publicidad y los proveedores de servicios y a estrategia de la nueva cuenta de Netflix «niega» esta opción a los consumidores al restringirles el acceso a Netflix a través de conexiones VPN durante períodos prolongados de tiempo.
En su opinión, «esto no es solo una limitación de la libertad de elección del usuario, sino de su privacidad y seguridad».
Por todo ello, OCU solicita a Netflix que reconsidere su nueva estrategia de cuentas y contraseñas y aborde «con urgencia» las inquietudes prácticas y legales planteadas por la Organización.