Desde el Estado Mayor de Defensa han decidido que la Base Aérea de Torrejón necesita estar lista para el verano. Para eso, el Jemad, Teodoro Esteban López Calderón, ha considerado necesario que se coloquen mil metros cuadrados de césped artificial en una de las edificaciones que forman parte de esta base, en concreto al edificio 201, para lo que han autorizado un gasto de hasta 26.000 euros, lo que equivale a dos sueldos anuales de un militar.
El contrato llega directamente desde la Jefatura de Asuntos Económicos del Estado Mayor de la Defensa, quien formula la adjudicación para que El Centro de Operaciones Aéreas Combinadas mejore su aspecto en el exterior a partir de todo un proceso de preparación del terreno para instalar «césped de uso decorativo residencial y paisajístico». Los 26.000 euros expedidos desde el Ministerio de Defensa cubrirán de verde la superficie de un espacio que realiza labores de vigilancia aérea para la OTAN, resguardando el espacio aéreo europeo de la organización al sur de los Alpes.
Este gasto «decorativo» se produce en un año en el que los militares le han recordado a Margarita Robles en numerosas ocasiones las condiciones de precariedad que se desprenden de sus salarios. En este sentido, Defensa no deja pendiente el cambio del césped de la unidad que trabaja para la OTAN, pero si deja sin aumentar el gasto en 120.000 militares españoles que trabajan en sus bases, quienes tienen unas condiciones que ellos mismos clasifican de «vergüenza», según la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME).
696,13 euros de sueldo base por ser soldado
Entrar en las Fuerzas Armadas de España tiene unas condiciones salariales muy parecidas a las de la hostelería, uno de los sectores más precarizados en la actualidad. Un soldado o un marinero cobra de sueldo neto poco más de 1.100 euros al mes durante los seis primeros años el cuerpo, lo que es una gran diferencia con respecto a los demás Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, sobre todo desde que en 2018 el ministro de Interior Grande-Marlaska formuló el Acuerdo de Equiparación Salarial, con el que se preveía un aumento del 38% de media, una «inversión récord en personal», según el ministerio de Interior, que asciende en los Presupuestos de 2023 a ocho mil millones de euros.
Sin embargo, los uniformados dependientes de Margarita Robles no han tenido la misma suerte. Han visto como el presupuesto en Defensa se ha aumentado hasta un 2% del PIB por su compromiso con la OTAN como respuesta de la guerra de Ucrania, pero no han llegado a percibir un beneficio de ese aumento en sus bolsillos. Mientas que un militar está recibiendo de forma anual unos 13.200 euros, el Consejo de Ministros aprueba todo tipo de gastos en armamento o el Jemad se gasta lo que podría ser el sueldo de dos militares en cambiar el césped de un edificio que trabaja para la OTAN.
Los colectivos de militares piden una respuesta y que dejen de echar «balones fuera»
Las asociaciones de las Fuerzas Armadas como ATME, ASFRAPRO y AUME aseguran que «llevan años» reclamando una mejora de condiciones y que la situación ha sido reconocida en el Parlamento «por un Jemad y por las dos últimas ministras de Defensa». Sin embargo, no ha habido una toma de medidas convincente para estos colectivos, quienes aseguran que, aunque haya diálogo, los responsables echan «balones fuera» sobre esta cuestión.
Además de estas organizaciones de trabajadores, el colectivo de suboficiales ASFARO va en la misma que sus homólogos y se une a las denuncias sobre la precariedad salarial que sufren lo que forman parte de esta línea militar. Así, esta organización lamenta que «Siempre estamos en primera línea cuando hay una crisis. Pero sólo recibimos una palmadita en la espalda» y aseguran que, a pesar de haber intentado entrar en contacto con el departamento de Robles, «El Ministerio de Defensa mira hacia otro lado».
Estas condiciones chocan de manera directa con los sueldos de aquellos altos cargos que no se hacen cargo de los reclamos. El Jemad Teodoro Esteban López Calderón percibe un salario anual de 126.000 euros, mientras que la ministra de Defensa, Margarita Robles, tiene una bonificación bruta anual de más de 79.000 euros. A esto hay que añadir que la institución ha aumentado considerablemente su gasto en armamento, llegando a firmar contratos de hasta 94 millones de euros.
Dentro del gasto de Defensa, se incluye así todo lo relacionado con sueldos, armamento y el mantenimiento de las instalaciones, entre otras cuestiones. Sin embargo, el hecho de invertir más de 26.000 euros para poner césped artificial en una base militar mientras sus uniformados reclaman una subida de salario que no llega, sitúa cuales son las prioridades del recién renovado Jemad, Teodoro Esteban López Calderón.