El Rey Felipe VI ha asegurado este martes que la situación actual es compleja y de incertidumbre pero «sigue habiendo muchas oportunidades de progreso si se gestionan bien», al tiempo que ha incidido en la necesidad de «levantar la mirada» y ver a largo plazo.
Lo ha dicho durante su discurso en la entrega del Premio Cercle d’Economia a la Construcción Europea que se ha otorgado en Barcelona al alcalde de Varsovia (Polonia), Rafal Trzaskowski, en la 38 Reunió Cercle d’Economia.
«Barcelona, Cataluña, España, Europa cuentan con grandes activos y grandes valores compartidos para beneficiarse de esas oportunidades», ha asegurado, y ha añadido que la colaboración es necesaria para ser capaces de aprovecharlos de forma eficaz.
Felipe VI ha asegurado que el proyecto europeo «atraviesa un momento trascendental» tras el Brexit, la pandemia y la guerra de Ucrania que, en sus palabras, paradójicamente ha resultado en un aumento de la confianza de los europeos hacia las instituciones europeas por la gestión realizada ante estos retos.
Ha destacado que la UE es admirada fuera de sus fronteras pese a los problemas reales que se van presentando y de las ineficiencias que «queden por pulir». «La España moderna no se entiende sin su pertenencia a la Unión Europea, como tampoco se entiende nuestra historia sin Europa, el Mediterráneo o América«, ha añadido.
El Rey ha dicho que para reactivar el futuro hace falta tener un buen diagnóstico e identificar las carencias y fortalezas: «A partir de ahí, recorrer juntos el camino que nos puede llevar a ser una sociedad más próspera y también más justa».
Asimismo, ha alertado de que se debe evitar acomodarse en lo logrado, ya que el mundo no se detiene y se debe dar respuesta al siguiente salto tecnológico, la siguiente gran crisis económica o de otra naturaleza, o el «siguiente envite geoestratégico».
Según el monarca, «los tiempos actuales son de transición y de crisis periódicas, solapadas o de muchas facetas», por lo que es necesario «levantar la mirada y tratar de tener una visión a largo plazo». Para ello, ha pedido atender lo inmediato y urgente pero sin olvidar «lo importante», el contexto.
Don Felipe ha elogiado el «papel clave y de gran generosidad» de Varsovia (Polonia) y de otras ciudades polacas como lugar de acogida, como también lo han sido otras ciudades españolas, ante la «la brutal agresión y destrucción a manos de Rusia«. «Se trata, sin duda, de una de las mayores crisis humanitarias que Europa ha sufrido en los últimos años», ha añadido.
Y ha resaltado que Varsovia es una gran capital europea: «La hemos admirado por su historia por cómo resurgió tras la destrucción sufrida no hace tanto en las guerras mundiales, especialmente durante la II Guerra Mundial, y con el pulso modernizador tras el fin de la Guerra Fría».
Asimismo, ha tenido palabras de elogio hacia la trayectoria de Trzaskowski «por su respeto al Estado de derecho, por la protección de los derechos de las minorías y por su enérgico europeísmo», y le ha agradecido que durante su discurso se haya expresado tanto en castellano como en catalán -además de en inglés-.
Felipe VI ha expresado sus condolencias por la muerte de los expresidentes del Cercle Vicenç Oller, Enric Corominas y Josep Piqué, y ha recordado al también exministro del PP -con quien tenía una relación personal- como «una gran persona y un gran servidor público».
«Su talla y honestidad intelectual, su generosidad de tiempo y de atención, y su comprensión y análisis de las dinámicas complejas del mundo internacional y de la economía han sido siempre muy apreciadas y admiradas en ámbitos muy diversos, tanto públicos, políticos, empresariales y académicos«, ha dicho.
Han estado la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez; el delegado del Gobierno en Cataluña, Carlos Prieto; el candidato a la alcaldía de Barcelona por Junts, Xavier Trias, y el presidente del Cercle, Jaume Guardiola, entre otros, y no ha habido presencia del Govern, aunque el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, participará por la tarde en el encuentro.
Trias, acompañado por la exconsellera de Acción Exterior de la Generalitat Victòria Alsina, ha esperado al Rey al finalizar el acto para saludarlo.