Ha sido la noticia de la semana. La deportista Beatriz Flamini abandonaba hace tan solo unos días la cueva que ha sido su hogar durante nada menos que 500 días. Casi dos años en los que ha estado en completo aislamiento.
A pesar de que puede haber personas más acostumbradass a esto, de hecho existe un pueblo escondido dentro de una cueva, lo cierto es que ha sido una experiencia que ha llevado a su cuerpo, y sentidos, al límite.
¿Cómo ha sido? Descubre las razones de esta mujer para recluirse en una cueva 500 días y cómo ha vivido todo.
6El proyecto «Timecave»
Esta experiencia de Beatriz entra dentro del proyecto «Timecave», que comenzó hace dos años. La deportista se puso en contacto con la productora Dokumalia para plantear lo que quería hacer: superar un reto en el que estuviera sola y sin contacto con el exterior dentro de una cueva durante 500 días. En todo este tiempo ha registrado su día a día, datos que han seguido también las Universidades de Granada y de Almería para comprobar cómo afecta al cuerpo el aislamiento social, así como la desorientación temporal extrema, entre otros factores.
